INAH anuncia actividades para aniversario luctuoso de Emiliano Zapata

domingo, 7 de abril de 2019 · 19:32
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Este miércoles 10 de abril se cumplen cien años de la muerte del caudillo revolucionario Emiliano Zapata, asesinado en 1919 en la hacienda de Chinameca, en Morelos, por órdenes del carrancista Jesús Guajardo. Para conmemorar el aniversario luctuoso, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) llevará a cabo un programa de actividades, que comprende la mesa redonda Reforma, libertad, justicia y ley; la apertura de la exposición fotográfica El reflejo de la tierra. Los pueblos de Morelos y la Revolución Mexicana; y la puesta en línea del archivo Voces Zapatistas. A través de un comunicado, el INAH destacó que desde de este miércoles 10, se podrá consultar en la página en internet de la Dirección de Estudios Históricos (DEH) el archivo que consta de alrededor de 150 entrevistas hechas con sobrevivientes del Ejército Libertador del Sur. En el sitio zapatavive.colmex.mx ya podían consultarse hace tiempo, fragmentos de algunas de esas entrevistas, realizadas en los años setenta en el marco de un proyecto de historia oral encabezado por la maestra Alicia Olivera, con la participación de los historiadores Laura Espejel López y Salvador Rueda Smithers. El material está resguardado en el Fondo de Testimonios Zapatistas en la Biblioteca Manuel Orozco y Berra de la DEH y ahora podrá consultarse íntegramente, luego de que las cintas magnetofónicas fueron digitalizadas. A las 17:00 horas del mismo miércoles, en el Teatro Narciso Mendoza, de la ciudad de Cuautla, se llevará a cabo la mesa redonda, con la participación de Édgar Castro Zapata, bisnieto de revolucionario y presidente de la Fundación Zapata; y los especialistas Rueda Smithers, actualmente director del Museo Nacional de Historia ubicado en el Castillo de Chapultepec, Espejel López, Francisco Pineda Gómez y Carlos Barreto Mark. La directora del Centro INAH Morelos, María Isabel Campos Goenaga, moderará el encuentro. Respecto de la exposición el instituto destaca que consta de 40 fotografías que relatan el surgimiento, desarrollo y desgaste de la lucha zapatista encabezada por el llamado “Atila del sur”, a un siglo de la “infausta emboscada” que le arrebató la vida. Se trata de “conocer las circunstancias que agobiaron en esa época a las comunidades morelenses, comprender sus demandas y sus derroteros dentro de la gran Revolución mexicana”. El curador de la muestra, exjefe de catalogación de la Fototeca Nacional y doctor en Historia, Arturo Valencia Islas, hace notar a través del INAH que las imágenes han sido poco difundidas y pertenecen al Fondo Casasola. Su narrativa inicia en el Porfiriato, pasa por la participación de los pueblos en el movimiento y se centra más en la colectividad que en la figura de Zapata: “La llegada de Porfirio Díaz a la presidencia en 1876, y sobre todo la construcción de un ramal del ferrocarril que unía al estado con el puerto de Veracruz, había aumentado la presión por la tierra. Los grandes propietarios de haciendas azucareras comenzaron a usurpar las tierras que comunidades y pequeños propietarios agrícolas habían trabajado desde la Colonia generando un ambiente cada vez más violento. “Para resistir estos nuevos agravios, los pueblos de Morelos comenzaron a reorganizarse siguiendo sus propias reglas. En muchas de estas comunidades, una nueva generación de dirigentes locales, jóvenes, y cada vez más inconformes llegaron a la jefatura de sus pueblos. Uno de esos nuevos líderes era Emiliano Zapata”. Organizada por la Secretaría de Turismo y Cultura de Morelos, la exposición estará abierta al público hasta el próximo 28 de abril en la Galería de Arte Contemporáneo de la Plaza Moctezuma, en Cuernavaca, de jueves a domingo de 11:00 a 17:00 horas. Entre las imágenes que podrán apreciarse se encuentra una donde los zapatistas están custodiando los carruajes de Francisco I. Madero y su comitiva en una gira por Morelos, el avance zapatista hacia la ciudad de México en los alrededores de Xochimilco, el famoso desayuno de los militantes en el Sanborns de los Azulejos, y el retrato del general Zapata en el cuartel de Cuernavaca. A decir de Valencia Islas “a pesar de que el movimiento de los pueblos de Morelos no logró los objetivos militares y muchas de las reivindicaciones que se planteó en un comienzo, su lucha se convirtió en un símbolo de la injusticia y de la resistencia de los débiles frente a los poderosos, símbolo que aún persiste dentro de la mentalidad de los mexicanos”.

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