Eugenio Barba y Julia Varley en México
CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Eugenio Barba y Julia Varley pisan los escenarios mexicanos y vuelven a revitalizar aquellos conceptos, como el de antropología teatral, que marcaron desde los setenta.
Fundador del Odin Teatret con sede en Hostebro, Dinamarca, Barba reivindica el teatro de las acciones físicas y la manera de descubrirle al público ese subconsciente que se trasluce en sus espectáculos. De joven fue asistente de Grotowsky y se separó para formar un nuevo grupo y desarrollar su propia práctica, retomando tradiciones de las danzas asiáticas balinesas y vinculándose con la cultura latinoamericana y afrocaribeña.
Al finalizar 2020, después de 56 años, dejará la dirección del Nordisk Teaterlaboratorium en Holstebro (NTLH), y Julia Varley será la coordinadora artística. Así lo comunicó Barba el pasado 9 de mayo en una carta abierta a sus colegas y amigos en todo el mundo.
El Odin Teatret ha visitado México frecuentemente desde 1984, y este fin de semana Eugenio Barba y Julia Varley estarán tanto para presentar Ave María/La Muerte se siente sola, como para transmitir sus conocimientos a través de una clase-demostración sólo un día, el domingo 19, en el Teatro Helénico.
En 1994 La Rueca, compañía de Susana Frank y Aline Menasé, invitó a Barba a impartir un taller de tres días, apoyadas por el INBA, sin costo para los participantes, aunque en esta ocasión costará de 300 a 600 pesos con descuento para estudiantes, igual que el espectáculo. En un teatro público. Hace 26 años el taller giró en torno a La construcción de la forma, y ahora el tema será Pensando en acciones.
El unipersonal Ave María, interpretado por Julia Varley, continúa la búsqueda de hablar con metáforas, con silencios; disociando imagen, palabra y movimiento, creando alegorías aleatorias para conformar un discurso de imágenes, conceptos y asociaciones libres, alrededor del tema de la muerte y la amistad entre dos actrices: Varley, inglesa de origen, que se integró al Odin Teatret desde 1976, y María Canepá (1921-2006), actriz de origen italiano naturalizada chilena, quien junto con su joven esposo, Juan Cuevas, hizo teatro aun durante la dictadura. Ellos fueron amigos de la pareja Barba/Varley, y Julia quiso reflexionar con ella sobre la muerte y lo que una actriz deja tras su desaparición. Muestra, a través de palabras en primera o tercera persona –y poemas de Pablo Neruda y Gonzalo Rojas–, imágenes elaboradas, donde la intérprete nunca enseña su rostro, gran reto técnico actoral.
En Ave María, que tendrá funciones el 17 y 18 de enero en el mismo lugar, es el personaje Mr. Peanut, con cabeza de calavera –que la actriz ha desarrollado en otros espectáculos–, al que le corresponde “encarnar el misterio de la transformación de la vida en muerte” y las preguntas que surgen alrededor. La voz en primera persona o en tercera, hablando de María o como María, la actriz chilena que experimentó el progresivo Alzhaimer y dedicó su vida al teatro, dejando su huella en muchas personas.
En la clase-demostración del domingo 19, estarán compartiendo su técnica y conceptos de antropología teatral, de la dramaturgia de la actriz, del director y del escritor. Observando de una manera dinámica lo que Eugenio Barba dice con palabras y lo que Julia Varley dice con acciones. Ella ha expresado también sus conceptos acerca de la actuación en su libro Piedras de agua, publicado por Edgar Ceballos en 2009 en Escenología, ya extinta.
Eugenio Barba, en la carta abierta avisando su retiro de la dirección del NTLH, concluye: “Mi enseñanza no se trasmite ni se extingue. Se evapora. Y cae como una lluvia sobre la cabeza de quien menos lo espera”.
Este texto se publicó el 19 de enero de 2020 en la edición 2255 de la revista Proceso