Análisis deportivo: Tres tristes tigres... De papel

martes, 19 de octubre de 2004 · 01:00
* "Asumo la culpa de todo": Mario Carrillo México, DF, 18 de octubre (apro) - Guillermo Cañedo de la Bárcena tiene que actuar como presidente del América Pero ¿lo dejará Emilio Azcárraga? Guillermo "Billy" Álvarez tiene que actuar como presidente del Cruz Azul Pero ¿lo dejará Carlos Hurtado? Jorge Vergara tiene que actuar como presidente de las Chivas Pero ¿lo dejará su ego? Los tres son, como diría Ortega y Gasset, ellos mismos y sus circunstancias El nuevo mandamás del América en realidad es un mandamenos El eterno presidente de la Máquina siempre es aconsejado por el poderoso promotor que vive en Miami y controla 80% de los movimientos en el futbol mexicano El dueño de las Chivas es un hombre de mundo, que anda con frecuencia de viaje y se entera por sus colaboradores de la marcha del equipo Él generalmente se enfrenta a dos problemas: su ego y el mal tino de sus dos ayudantes (Néstor de la Torre e Ivar Sisniega) El caso es que los tres equipos con mayor convocatoria de México atraviesan malas rachas Y en el caso de los dos cuadros capitalinos, una de las peores de sus historias No es concebible que América, Cruz Azul ni Chivas pasen estas angustias Para que ocurriesen, se sumaron varios factores, todos ellos relaciones con los intereses creados o el abandono El dueño de Chivas no puede atender ciento por ciento al equipo porque no vive de eso Atiende los negocios de su empresa Omnilife y, como la canción, el tiempo que le queda libre, si le es posible, se lo dedica a Chivas Con Cruz Azul ocurre un fenómeno similar porque los hermanos Álvarez Cuevas, herederos de la tradición familiar, tampoco tienen tiempo de atender al equipo Y muchas de las decisiones las toma el promotor Carlos Hurtado desde Miami, como mantener en el cargo a Luis Fernando Tena o elegir a todos los entrenadores de los últimos años, con excepción de Enrique Meza, que llegó solito a la institución Y América tenía primero el problema de que el dueño Emilio Azcárraga no se quería meter de lleno y ahora no se quiere salir ni por asomo De hecho él es quien toma las determinaciones y no Cañedo White La última oportunidad de mando se la dieron a Javier Pérez Teuffer, pero la desaprovechó al involucrarse de más con los jugadores (se habla hasta de fiestas nocturnas con su autorización y compañía), además que no supo controlar el "estrellismo" de los futbolistas El caso es que hoy tres de las instituciones del futbol mexicano más importantes están en apuros Lucen como tres tristes tigres pero de papel

Comentarios