MÉXICO, D.F. (apro).- A sólo una semana de haber finalizado los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, las medallas de 17 deportistas presentaron decoloración. Uno de los casos es el de la nadadora mexicana Patricia Castañeda, quien ganó bronce en la prueba de 4x200 metros relevo libre y decidió guardar su medalla en un cajón. Sin embargo, cuando fue a buscarla para mostrarla a su mamá, la presea estaba despintada. El color, en vez del bronce original, lucía plateado. Por su parte, el remero mexicano Patrick Loliger, devolvió la medalla de bronce que recibió en la prueba de cuatro pares de remos cortos por la decoloración que sufrió. “Desde el primer día se empezó a despintar hasta que quedó de un color como de acero y se le cayó toda la pintura”, relató al diario Reforma. La presea fue devuelta a la Casa de Moneda, que fue la encargada de hacer las medallas para el evento deportivo, cuya ceremonia de clausura tuvo lugar hace apenas siete días, el 30 de octubre. La Casa ofreció una disculpa a Loliger y le prometió “reponérsela pronto”. En tanto, el argentino Alexis Clementín, quien obtuvo bronce en pelota, en la categoría frontenis, también sufrió la mala calidad de las medallas: “Mi mamá le puso un producto y quedó brillante, como al principio. Pero recién vuelvo y veo que otra vez se puso oscura, nada que ver con el bronce original. No se puede creer, es una pena”, dijo.