Sub 17: llenarán estadio Omnilife con alumnos de secundaria

miércoles, 15 de junio de 2011 · 16:35
GUADALAJARA, Jal. (apro).- Ante las bajas ventas de boletos para los partidos del Mundial Sub 17 en Guadalajara, las autoridades estatales han encontrado una manera de solucionarle el problema a la Federación Mexicana de Futbol: acarrear a alumnos de secundaria para llenar las tribunas del Estadio Omnilife. De acuerdo con información de la Secretaría de Educación de Jalisco (SEJ), 14 mil alumnos de distintas secundarias acudirán a las dobles carteleras del mundial de futbol en el nuevo Estadio de Chivas del 20 al 26 de junio, con la fase de grupos, y el 29 de junio y 7 de julio, en la segunda fase. El director general de Educación Secundaria de la SEJ, Salvador Rodríguez, señaló en un comunicado que 14 mil alumnos acudirán de forma gratuita a cinco partidos. Los boletos de cortesía ya están siendo distribuidos. Según la información oficial, los alumnos acarreados no perderán sus clases, sino que luego de finalizar su jornada escolar en el turno matutino los llevarán en autobuses al estadio, ubicado en una zona de complicada vialidad. Ahí, verán los dos partidos, el de las 15:00 horas y el de las 18:00 horas. “No hay inconformidad de los padres de familia”, dijo el funcionario. Sin embargo, de acuerdo con el reportero radiofónico Ignacio Pérez Vega, el aviso enviado por la SEJ a los padres de familia señala “claramente que los estudiantes convocados son del turno vespertino, por lo cual sí perderían clases”. En la sede tapatía, como es costumbre, participará la selección de Brasil, además de los combinados de Dinamarca, Australia y Costa de Marfil. Las hostilidades abren el próximo domingo 26 a las 15:00 horas, con el encuentro Brasil-Dinamarca. El estadio de Jorge Vergara también albergará un partido de octavos de final el 29 de junio y la semifinal del torneo el 7 de julio. Padres de familia y profesores consultados por Apro, mostraron su molestia por la medida. “Quieren que la gente del sindicato vayamos a cuidar a los muchachos al estadio y obviamente vamos a perder clase. Además si algo pasa, son demasiados niños y no vamos a poder darnos abasto”, explicó un profesor de secundaria. Y otro padre de familia, también mostró su temor, pues los partidos terminan ya en la noche y el inmueble está ubicado en una zona alejada, en el periférico. “Es muy riesgoso aunque ellos estén contentos por ir a perder clase”.

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