MÉXICO, D.F. (apro).- Alberto García Aspe, director deportivo de los Pumas de la Universidad, reconoció que fue un error la contratación del ahora cesado entrenador Mario Carrillo. Además, adelantó que no piensa renunciar a su cargo y negó que su gestión sea vergonzosa. “Sí nos hemos equivocado en algo y es una realidad. Y la afición es escuchada, pero habrá un análisis cuando acabe el torneo y se dará a la luz pública. Ahora lo que quiero es darle tranquilidad al grupo. Claro que nos hemos equivocado”, dijo Aspe en conferencia de prensa. Aceptó en parte que “hay una responsabilidad deportiva y no tengo por qué contestarlo” –de su caso en específico– pues aseguró que sólo “tengo que darles respuesta al patronato y al ingeniero Jorge Borja”. Admitió que entre las razones del despido del entrenador Carrillo influyeron situaciones extracancha que “no se darán a conocer. Las situaciones no las voy a ventilar; se quedan aquí adentro”. Reveló que en ocasiones no estuvo de acuerdo con las decisiones de Mario Carrillo, principalmente el haber marginado a los refuerzos de la presente temporada, los argentinos Emanuel Villa y Martín Romagnoli, así como al español Luis García. Dijo que lo anterior lo discutieron con el entrenador, “él tomó sus decisiones y yo nunca impongo”. Indicó que sólo “tendría vergüenza si me hubiera robado algo, si hubiera hecho algo indebido, si hubiera recibido dinero por algo”. García Aspe presentó esta mañana a José Antonio Torres Servín, exauxiliar de Carrillo, quien completará las dos jornadas restantes de la actual temporada en la Liga Mx.