MÉXICO, D.F. (apro).- Consciente de los alcances de su selección, el entrenador de Nueva Zelanda, Ricki Herbert, asegura que rescatar un resultado ante México en el estadio Azteca “parece una misión imposible”. No obstante, refirió que todos los jugadores tienen su oportunidad. “Somos realistas y es difícil, pero (el juego) hay que disputarlo, y esperemos regresar a Wellington con un buen resultado”. A unas horas de enfrentar al Tri en el primer juego del repechaje mundialista, el entrenador de Nueva Zelanda reconoció que el mejor resultado que hay en este partido “es la victoria”. “Eso es lo que siempre se busca”, insistió Herbert al reconocer que hasta el mejor equipo del mundo “tendría problemas al llegar aquí, por el ambiente, la gente, y todo lo que es estar en el Azteca”. Por ello, dijo que espera un juego complicado. Aceptó que en muchos lapsos del partido su equipo no tendrá la posesión del balón, pero han trabajado en esta parte “y buscaremos aprovechar nuestras oportunidades”. Nueva Zelanda realizó esta mañana el reconocimiento a la cancha del estadio con una ligera sesión de entrenamiento, el único en territorio nacional antes de enfrentar a México. En Nueva Zelanda, el juego de repechaje clasificatorio al Mundial de Brasil 2014 dio origen a la controversia. Por ejemplo, el periódico The Neo Zealend Herald criticó que la Federación Mexicana de Futbol haya publicado y anticipado a los medios de comunicación locales sobre la llegada del campeón de Oceanía. Para el diario, esta fue una estrategia de hostigamiento al representativo de Nueva Zelanda, tras detallar que los jugadores fueron abordados por los reporteros en el aeropuerto de la Ciudad de México. Además advirtió que la selección mexicana venció en la “batalla de uniformes” al confirmar que Nueva Zelanda saldrá a la cancha con el uniforme de visitante –color negro–, que, a consideración del diario, podría tener repercusiones en caso de imperar un clima caluroso. El partido se disputará a las 14:30 horas locales. México afronta este repechaje después del papelón realizado en el hexagonal final clasificatorio de Concacaf, donde no pudo alcanzar uno de los tres boletos directos a la Copa el Mundo Brasil 2014. Nueva Zelanda afrontará este repechaje sin su principal jugador, el capitán Winston Reid, del West Ham de Inglaterra, por una lesión en el tobillo. El árbitro húngaro Viktor Kassai conducirá las acciones del juego.