MÉXICO, D.F. (apro).- La Unión de Transportistas de Turismo Unidos de León busca afanosamente un diálogo con el presidente del equipo de futbol León, Jesús Martínez  hijo, a quien le piden se responsabilice de los daños causados por seguidores del club Chivas a los autobuses que transportaron a los fanáticos guanajuatenses a Guadalajara. El pasado domingo, los aficionados del equipo local atacaron a los autobuses que transportaban tanto al plantel del equipo León como a las unidades en las que viajaban los aficionados, tras el juego entre Chivas y León en el estadio Omnilife. Los daños ocasionados por los seguidores de Chivas a los autobuses de los aficionados del León ascienden a medio millón pesos, “y no tenemos dinero para cubrirlos”, de acuerdo con estimaciones de Francisco Javier Huerta Chávez, integrante de dicha unión de  transportistas. Huerta Chávez reveló que hay autobuses que sufrieron daños hasta por 70 mil pesos. Y hoy, cerca de un centenar de la Unión de Transportistas de Turismo Unidos exigieron a la directiva esmeralda el pago de los estropicios ocasionados a cerca de 100 unidades. Los transportistas argumentan que los seguros de las unidades no cubren daños ocasionados por vandalismo. El equipo León es propiedad de Jesús Martínez y el empresario Carlos Slim, quienes también comparten sociedad en las acciones del club Pachuca.