MÉXICO, D.F. (apro).- Bayern Munich humilló a un deslucido Barcelona de la forma más dolorosa posible: le marcó tres goles (3-0) en su propia casa y avanzó a la final de la Liga de Campeones con un global de 7-0. La disputa por el título de la Liga de Campeones se decidirá entre equipos alemanes, ya que el otro oponente será el Borussia Dortmund, que en la víspera eliminó al Real Madrid. El argentino Lionel Messi, el mejor del mundo y quien se vislumbraba como el hombre que podría cambiar el curso de la balanza, no vio acción por lesión, en la peor noticia que pudieron recibir los seguidores azulgranas. El Bayern avanzó con todos los merecimientos gracias a las anotaciones de Arjen Robben, Piqué en propia portería y el goleador Thomas Müller. El conjunto local nunca dio visos de una potencial remontada frente a un adversario que llegó fortalecido tras su goleada (4-0) en el juego de ida. En el complemento, y todavía con la ilusión en el graderío puesta en Messi, el Bayern cambió la historia del partido tras el gol de Robben (minuto 49). Con ese marcador, Barcelona requería ahora anotar seis goles en menos de 41 minutos. Pero todo empeoró con las anotaciones de Piqué (al 72’) en su propia puerta y Müller (al 76’), quien de paso alcanzó a Messi con ocho goles en la lista de goleadores. Al conjunto español le queda el consuelo en la liga local, cuyo título tiene prácticamente amarrado. El título de la Liga de Campeones se jugará el 25 de mayo en Wembley. Para el Bayern, que suma cuatro títulos, será su décima final a la que accede. El entrenador del Bayern Munich, Jupp Heynckes, admitió que tanto su equipo como él se sorprendieron de que Messi no haya jugado.