MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Cruz Azul prácticamente amarró su pase a la final del Clausura 2013 con los tres goles que le anotó a domicilio al Santos Laguna que fue incapaz de frenar la impresionante ofensiva desplegada por los celestes. Desde el amanecer del juego de ida de las semifinales, el equipo de Guillermo Vázquez marcó las condiciones en el partido. Con un remate de cabeza, Gerardo Flores fusiló a Oswaldo Sánchez en el cobro de una falta por parte de Christian Giménez al minuto 3. El Santos fue una pálida sombra del equipo superofensivo que genera múltiples jugadas de gol. No había creado ni una sola oportunidad de peligro cuando Pablo Barrera ya había marcado el 2-0 en una jugada en la que "Chaco" Giménez filtró para Javier "Chuletita" Orozco un balón que el extremo azul convirtió en golazo. Con dos goles encima, los de la Laguna se fueron al descanso, pero para el segundo tiempo no hubo revulsivo ni jugadas de peligro que complicaran a Jesús Corona, salvo aquel disparo a quemarropa de Darwin Quintero que al minuto 78 sacó a una mano el guardameta cruzazulino. A la cascada de infortunios que bañaron al equipo norteño, se sumó el yerro que dejó medio muerto al Santos: Rafael Figueroa intentó despejar un balón que quería controlar Alejandro Vela y terminó por bombearlo por encima de Oswaldo Sánchez para el 3-0 final. Santos tiene un panorama sombrío para el partido de vuelta que se disputará el próximo domingo en el estadio Azul: está obligado a marcar cuatro goles si es que aspira a dejar fuera de la final a la de nuevo ¿Máquina Celeste?.