MÉXICO, D.F. (apro).- La selección mexicana Sub 17 apenas rescató el empate sin gol ante su similar de Australia y dejó en suspenso su clasificación a la fase de octavos de final en el Mundial de la especialidad que se realiza en Chile. Ahora la selección que dirige Mario Arteaga conocerá su suerte tras su duelo contra Alemania, el próximo sábado 24, en el cierre de la fase de grupos. El representativo nacional exhibió dos caras totalmente opuestas, ya que después de dominar al conjunto australiano en el primer tiempo, terminó por cederle la iniciativa al rival en la parte complementaria. Incluso, de no haber sido por un par de intervenciones atinadas del portero Abraham Romero, otro sería el resultado. Primero, el guardameta envió con ambas manos el remate a bocajarro del delantero adversario al minuto 56. Todavía, Javier Ibarra se encontró con una magnífica ocasión de anotar, pero su remate lo estrelló en el portero al minuto 75. Doce minutos después, Romero impidió el tanto de los australianos, que fueron infinitamente superiores a los mexicanos en el segundo periodo. El entrenador de la selección Sub 17, Mario Arteaga, aceptó que Australia le cerró los espacios al equipo mexicano. Y reconoció que de antemano sabía que el rival se iba a portar de esa manera, “porque nos estudió, nos presionó muy bien y ese fue el mérito de ellos”. Según Arteaga, México encontró sus oportunidades, “pero no tuvimos la paciencia de anotar. El Mundial va a ser así de apretado y de difícil. Debemos tener la capacidad para contrarrestar”.