MÉXICO, D.F. (apro).- Julio César Nava, delantero del equipo Jaguares de Chiapas y sancionado por la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut) durante ocho meses por dar positivo en una prueba de dopaje, reconoció que plantea la posibilidad de apelar el castigo. El jugador negó tener responsabilidad en el dopaje, aunque admitió que no tenía tanta información sobre el tema. Eso, dijo, hace susceptible a cualquiera de cometer un incidente de esa naturaleza. De acuerdo con Nava, el problema de la sanción derivó de un golpe que recibió. “No podía llegar al juego inmediato, comenté lo del dolor, y así pasó”, dijo sin precisar detalles. “Hay 15 días para la apelación con la Federación y 21 días de plazo con el TAS, por si es necesario”, refirió el futbolista. Nava García, de 25 años de edad, contó que desde el pasado 27 de diciembre le notificaron que dio positivo al consumo de la sustancia betametasona, incluida en la lista de elementos prohibidos por la Agencia Mundial Antidopaje. De esta manera y según el artículo 6 del Reglamento Antidopaje de la FIFA, el jugador regresaría a la actividad futbolística hasta después del 27 de agosto, Es decir, luego de disputarse la cuarta fecha del siguiente torneo en la Liga Mx: Apertura 2015. El pasado jueves 5, la Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol anunció la inhabilitación del jugador de Chiapas, luego de más de dos meses de analizar la situación del futbolista. “No sé si es justo (el castigo) o no; no sé en qué términos. Desafortunadamente ya está la sanción. Vamos a tratar de analizar la resolución y ver si es factible apelar o no”, sostuvo el jugador. “Claro que consideré que la sanción pudo ser peor. El tope son dos años y por las atenuantes se redujo… no es fácil. Ocho meses es mucho tiempo para un jugador”, aceptó Nava.