CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Xolos de Tijuana eliminó de visitante a Rayados de Monterrey por 2-1 (3-2 el global) y se convirtió en inesperado semifinalista de la liguilla del torneo Clausura 2018. Monterrey recibió al equipo fronterizo con la ventaja en el global (1-1), lo que le daba su clasificación virtual, pero fue sorprendido con un par de goles en tan sólo 18 minutos, lo que complicó seriamente sus aspiraciones. Con sus goles tempraneros, los Xolos invirtieron los papeles en un abrir y cerrar de ojos, y en condición de visitante, pues ahora los discípulos de Antonio Mohamed requerían de dos anotaciones para avanzar de fase. En contraste, los Xolos llegaron a Monterrey con la urgencia de un gol, mismo que lograron al minuto 5, cuando el ecuatoriano Miller Bolaños les dio la ventaja con un remate lejano que golpeó en la espalda del defensa Leonel Vangioni que dejó sin oportunidad de reacción al guardameta Hugo González. La anotación le daba momentáneamente el boleto semifinalista al cuadro visitante. Todavía, Monterrey encontró las oportunidades de emparejar la cuenta con dos aproximaciones del colombiano Dorlan Pabón en la primera parte. Sin embargo, en el mejor momento de los Xolos, el delantero Gustavo Bou desbordó por la banda derecha, se quitó con una barrida al zaguero José María Basanta y habilitó a Juan Lucero, quien simplemente empujó el balón a la meta del Monterrey al minuto 23. Confundido en el campo y en las ideas, Monterrey requería ahora de tres goles. El caso es que los Rayados continuaron sin reaccionar en toda la primera parte. No obstante, los locales descontaron el marcador apenas se reanudaron las acciones con un remate cruzado y de derecha del colombiano Dorlan Pabón, quien capitalizó el servicio de Avilés Hurtado al minuto 46. Después, en busca de darle la vuelta al partido, Monterrey no se bajó de la bravísima contienda, pero sus delanteros carecieron de tino y contundencia para evitar que el panorama se les complicara, tal y como fue... Tras la eliminación del equipo, los aficionados del Monterrey, que abarrotaron las gradas del estadio, despidieron a sus jugadores y cuerpo técnico con sonoras silbatinas.