CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las Grandes Ligas de Beisbol (MLB) investigarán si los Medias Rojas de Boston usaron su sala de repetición de videos para robar señales de los pitchers y catchers rivales durante la campaña regular de 2018 cuando ganaron la Serie Mundial. Este martes, el portal de deportes The Athletic publicó un reportaje en el que cita a tres fuentes anónimas que formaron parte de los Medias Rojas durante 2018, quienes detallaron que algunos jugadores visitaban la sala de repeticiones durante los juegos para recibir información sobre la secuencia de las señales. Esas fuentes dijeron que el equipo no pudo hacerlo durante los playoffs debido a la presencia de empleados de la MLB. https://twitter.com/TheAthleticMLB/status/1214677223367536640?s=20 “El comisionado (Rob Manfred) dejó claro a los clubes en el memorándum del 15 de septiembre de 2017 sobre cuán seria sería una violación a las normas sobre el uso de dispositivos electrónicos o el uso inapropiado de la sala de repeticiones. Dadas estas denuncias, MLB iniciará una investigará sobre este asunto”, informó la MLB en un comunicado. Los Medias Rojas dieron a conocer que cooperarán con la investigación. El incidente que propició la advertencia del comisionado Rob Manfred a los equipos en 2017 involucró a los Medias Rojas por enviar comunicaciones electrónicas de su sala de repeticiones a un preparador físico en la caseta durante una serie en agosto de ese año ante los Yanquis de Nueva York. En aquel año, el diario The New York Times publicó que el gerente de los Yanquis, Brian Cashman, se quejó ante el comisionado por el incidente. Según la publicación, en el video se ve a un empleado de Boston observando su Apple Watch en el dugout pasándole mensajes a los jugadores. Manfred dijo entonces que las subsiguientes infracciones acarrearán sanciones más severas, incluyendo despojar de selecciones del draft a los equipos. The Athletic también informó el mes pasado que los Astros de Houston presuntamente robaron señas durante sus juegos en casa de la temporada de 2017 en la que ganaron la Serie Mundial. Para lograrlo, los Astros instalaron una cámara en el jardín central.