México, D F, 25 de junio (apro)- La burocratización en Financiera Rural demuestra falta de sensibilidad a la problemática del productor, pues los requisitos que exige obedecen a criterios bancarios comerciales y no a los de fomento para el desarrollo productivo del país, denunció Javier López Macías, presidente de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social (Unimos) "El principal problema del crédito para el campo está en que las instituciones financieras que fueron creadas precisamente para el fomento del crédito, no han entendido su papel, simplificando trámites; y carecen de una orientación para hacer más flexibles los criterios para incubar proyectos exitosos con apalancamiento oportuno", afirmó López Macías señaló que el director de la Financiera Rural, Enrique de la Madrid, no acata las instrucciones del presidente Felipe Calderón de dar a los pequeños productores créditos viables para reactivar el agro nacional Al comentar las recientes declaraciones del director de Financiera Rural, en el sentido de que "la tenencia de la tierra, la falta de proyectos rentables, el papeleo y la cultura del no pago, son los principales inhibidores del crédito", el dirigente de Unimos, dijo que el papeleo al que se refiere es institucionalizado, y a pesar de que los productores cumplen con todos los trámites en tiempo y forma, el financiamiento nunca es oportuno Sobre la cultura del no pago, a la que se refiere el director general de Financiera Rural, dijo que es por falta de integración en los instrumentos del crédito, porque si éste no es del tamaño suficiente, ni oportuno, ni tiene la solvencia necesaria para el productor, no funciona "Normalmente los proyectos se tienen que ajustar a lo que el productor logra por diferentes fuentes, incluso el agiotismo que les cobra hasta 20 por ciento mensual por los prestamos otorgados, y no existe una planeación de compras en volumen o volúmenes de escala", subrayó El presidente de Unimos dijo que el poco crédito que hay en Financiera Rural no es precisamente para el sector que no tiene recursos, sino que está dirigido a productores que pueden cubrir los requisitos comerciales de cualquier banco privado