MÉXICO, D.F. (apro).- El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) afirmó que el subsidio de 170 mil millones de pesos a las gasolinas es “una cifra presupuestalmente insostenible” para las finanzas públicas del país, por lo que demandó corregir el uso de recursos públicos. Es lamentable, añadió, que el precio de las gasolinas mantenga “un control artificial y un subsidio creciente”. El organismo, presidido por Mario Sánchez Ruiz, señaló que “si bien los legisladores aprobaron que se mantenga el desliz mensual en el precio del combustible, estamos muy lejos de alcanzar el valor real de un producto que importamos en grandes cantidades y que genera costos elevados para el presupuesto público”. Señaló que con el equivalente al subsidio asignado para 2011 --170 mil millones de pesos-- se podrían construir 567 mil viviendas de interés social, de un precio promedio de 300 mil pesos, con una importante derrama en empleos. El CCE insistió en corregir el uso inadecuado de recursos públicos para el sostenimiento artificial del precio de los combustibles, pero pidió “abrir espacio a la inversión privada en temas como el de refinación” que, apuntó, “permitiría detonar el desarrollo eficiente del sector energético nacional”. En junio pasado, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) señaló que “las clases pudientes” en México son las verdaderas beneficiarias de los subsidios a las gasolinas que otorga el gobierno federal, recursos que, por cierto, cuadruplican el gasto dedicado al combate a la pobreza. A su vez, el PNUD destacó que el país “gasta cada año cuatro veces más en subsidiar el combustible que en todos los programas para combatir la pobreza. Cada mes, el dueño de un camioneta de lujo que llena su tanque recibe del Estado unos mil 800 pesos, mientras que a una familia de cuatro miembros en pobreza extrema, el Programa Oportunidades apenas le entrega mil 400 pesos”, señaló.