Cierra BMV con ganancia de 1.13%, tras caer 7.4% en una semana
MÉXICO, D.F. (apro).- Después de tres días consecutivos a la baja, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró con una ganancia de 1.13% para terminar la semana con una pérdida de 6.39%.
El informe sobre el repunte del empleo en Estados Unidos, por encima de lo estimado, y el mensaje de Barack Obama con el que intentó calmar los mercados, ayudaron a que la BMV terminara la jornada con una tendencia positiva.
Sin embargo, el anuncio del empleo y el mensaje de Obama no tuvieron la misma repercusión en otros mercados internacionales, pues terminaron la jornada a la baja, aunque menos pronunciada que la víspera, debido al temor de contagio en la zona euro por problemas financieros de Italia, principalmente.
En México, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) tuvo varias caídas desde el pasado 29 de julio hasta llegar a -7.4%, la peor desde 2009, que logró moderarse gracias a la recuperación con la que cerró hoy el mercado bursátil mexicano.
La inestabilidad, que alcanzó a los mercados de todo el mundo, se debió a la incertidumbre que creó la aprobación del endeudamiento de Estados Unidos y de igual forma impactó a México que después de cuatro sesiones de caídas seguidas, cerró hoy con una ligera ganancia.
El principal indicador accionario, el IPC, subió 375.24 enteros respecto al nivel previo, con lo que se situó en 33 mil 697.87 unidades, apoyado por el avance de Wal-Mart, Cemex, Grupo México y América Móvil.
América Móvil cerró con ganancia de 1.07%, Wal-Mart subió 3.73%, Grupo México avanzó 2.13% y Cemex 1.31%.
El IPC cerró en línea con el Dow Jones de Wall Street, que terminó con 0.54 por ciento de ganancia, mientras que el índice Nasdaq finalizó con una pérdida de 0.94 por ciento.
Durante la jornada de hoy el IPC registró un descenso de hasta 1.90% pero rebotó hasta ubicarse en 1.13% de avance. Sin embargo, la pérdida semanal se ubicó en 6.39%, debido no sólo a la situación económica de Estados Unidos sino de Europa.
Las bolsas de valores mostraron alta volatilidad en la sesión de este viernes debido a los datos de nómina no agrícola y al mejoramiento en la tasa de desempleo de Estados Unidos, lo que dio un respiro a los inversionistas.
Según el presidente Obama, hubo un aumento de 154 mil puestos de trabajo en el sector privado y aunque modesta, la cifra es aprovechada por su administración para ahuyentar el fantasma de una recesión en Estados Unidos y Europa.
No obstante, la cifra del incremento de empleo significa un avance de .1% pues pasó de 9.2 a 9.1%, porcentaje que sigue siendo muy elevado, ya que actualmente 13.9 millones de estadunidenses están sin empleo.
"Vamos a superar esto, las cosas mejorarán", fue la frase que utilizó Obama para tratar de transmitir calma a los mercados internacionales.
Luego de enumerar distintos factores externos que, a su juicio, afectaron la estabilidad financiera del país como los efectos de la revuelta árabe de primavera que afectó el precio del gas y el petróleo; el tsunami japonés con su impacto en la cadena de suministros y la extraordinaria incertidumbre económica que se vive en Europa, Obama admitió que también ha habido errores internos.
"Si queremos que nuestros negocios tengan la confidencia que necesitan para invertir y contratar personal, tenemos que hacer las cosas mejor que lo hemos hecho hasta ahora", dijo Obama Al participar en un acto en la Navy Yard de Washington.
Su declaración fue una abierta crítica al ambiente partidista que ha dominado el debate para sacar a Estados Unidos del brete y alejarlo de la amenaza de una nueva recesión.
"Tenemos que ser capaces de trabajar juntos para que nuestra economía vuelva a crecer y para que nuestras finanzas se fortalezcan en el largo plazo", dijo a los congresistas, a quienes conminó a crear, a partir de septiembre, nuevas iniciativas para estimular las fuentes de empleo que el tejido social y la economía nacional reclaman.
Además de la situación de Estados Unidos, prevalecen los temores por la posibilidad de que la crisis europea se extienda.
En Italia la prima de riesgo superó a la española, por lo que el primer ministro italiano Silvio Berlusconi afirmó que su país acelerará las medidas de austeridad para obtener un presupuesto balanceado para 2013, un año antes de lo planeado.