MÉXICO, D.F. (apro).- El secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray, aseguró que el Programa Nacional de Infraestructura (PNI) dejará a la economía mexicana un crecimiento entre 1.8 y 2 puntos porcentuales adicionales al concluir la presidencia de Enrique Peña Nieto. Al anunciar dicho programa en la residencia oficial de Los Pinos, el encargado de las finanzas públicas del país precisó que además se generarán 350 mil empleos formales al año. El gobierno de Peña Nieto hizo el anuncio 17 meses después de tomar posesión, mientras que el gobierno pasado, encabezado por Felipe Calderón realizó lo propio, medio año después de arrancar su administración. El actual Programa Nacional de Infraestructura considera obras por 7.7 billones de pesos, contemplados en 743 programas y proyectos de inversión planeados entre el 2014 y el 2018. Los recursos (4.8 billones públicos y 2.8 de financiamiento privado) se destinarán a siete sectores. No obstante, el que absorbe la mayor cantidad del dinero es el energético en el cual 3.2 billones serán para desarrollar obras relacionadas con Petróleos Mexicanos (Pemex) con 123 proyectos; 1.8 billones para el sector de desarrollo agrario, territorial y urbano con cuatro proyectos; y 1.3 billones para comunicaciones y transportes destinados a 223 proyectos. Además, 598 mil millones de pesos serán para 138 proyectos a través de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); 417 mil millones destinados al sector hidráulico donde se desarrollarán 84 proyectos; 181 mil millones para el sector turismo que cuenta con 83 proyectos y 72 mil millones corresponden al sector salud que tendrá 87 proyectos. En el anuncio estuvo prácticamente todo el gabinete económico del presidente, además de gobernadores, empresarios y representantes de la industria de la construcción. Según el titular de la SHCP, el PNI “presta por primera vez un énfasis especial a la región del país que más lo necesita, a la región del Sur-Sureste, destinando un billón 250 mil millones de pesos a la infraestructura en Sur-Sureste”. Videgaray enfatizó que el sur-sureste se encuentra 87% de los municipios con niveles de marginación alto o muy alto y 37% de la población mexicana en pobreza. “El rezago implica que en estados como Chiapas, Guerrero y Oaxaca, el ingreso medio es la mitad del PIB per cápita en el resto del país”, puntualizó. Sin embargo, esos estados no tendrán la inversión que se hará en Veracruz, Campeche o Tabasco los cuales corresponden a la misma región y contarán con recursos superiores a 200 mil millones de pesos. En contraste, en el mejor de los casos, Oaxaca contará con 124 mil millones, Chiapas con 52 mil millones y Guerrero con sólo 28 mil millones de pesos. Infraestructura para el comercio Al tomar el micrófono, Peña Nieto enfatizó los proyectos de los trenes de pasajeros México-Querétaro y México-Toluca, así como el Tren Transpeninsular, en Quintana Roo y Yucatán, y de igual forma la ampliación del Tren Eléctrico de Guadalajara y el Metro de Monterrey. Además de que “se concretarán diversos proyectos ferroviarios para el transporte de mercancías”, dijo. El mandatario federal habló de ampliar los principales puertos del país como Veracruz, Altamira y Lázaro Cárdenas. Adelantó que se respaldará la instalación de una red nacional compartida de banda ancha; el acceso universal a Internet en 250 mil espacios y sitios públicos; y la operación plena del Sistema Satelital MEXSAT, con el objetivo de cerrar la brecha digital entre los mexicanos. Señaló que se modernizarán las refinerías de Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz y Tula “para darle mayor valor agregado a nuestros productos petroleros y reducir la dependencia del exterior”. También mencionó que se concluirán las obras del Túnel Emisor Oriente y del Plan Hídrico Integral de Tabasco, para reducir el riesgo de inundaciones catastróficas en el Valle de México y en la ciudad de Villahermosa, respectivamente. Peña Nieto dijo que en el sector turismo se desarrollarán Centros Integralmente Planeados, en las zonas arqueológicas de Calakmul, Chichén Itzá, Palenque y Teotihuacán. El asunto es que con esta red de infraestructura el gobierno pretende que “México como un gran centro logístico global de alto valor agregado y, para ello, se aprovechará de manera integral su privilegiada ubicación geográfica, su amplia y creciente red de Tratados de Libre Comercio, así como su probada capacidad exportadora de calidad mundial”. Actualmente, el país ocupa el lugar 64 entre 148 países de acuerdo al Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial.