MÉXICO, D.F. (apro).- Los especialistas del sector privado redujeron por séptima ocasión consecutiva el pronóstico de crecimiento económico del país, el cual pasó de 2.65% en junio, a 2.56% en julio, informó el Banco de México (Banxico). La previsión de los economistas consultados por el banco central arrojan signos pesimistas, ya que en enero el pronóstico era de 3.40%, pasaron los meses y ya para julio señalaron que la economía sólo crecerá 2.56% en este año. Aún más, pues cuando el Banxico consultó a los analistas sobre la probabilidad de que en alguno de los próximos trimestres se observe una reducción respecto del trimestre previo en el nivel del PIB real ajustado por estacionalidad, es decir, la expectativa de que se registre una tasa negativa de variación trimestral desestacionalizada del PIB real, la respuesta fue la siguiente: “La probabilidad media de que en alguno de los trimestres sobre los que se preguntó se observe una caída del PIB, aumentó con respecto de la encuesta del mes previo, excepto para el tercer trimestre de 2014”. Por si fuera poco, en el caso de la tasa de crecimiento anual del PIB de 2014, los analistas disminuyeron la probabilidad asignada al intervalo de 3.0 a 3.4%, al tiempo que aumentaron la probabilidad otorgada al intervalo de 2.5 a 2.9%. De acuerdo con el análisis del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), elaborado por José Luis de la Cruz, “el bajo crecimiento económico se da en una situación en la que además se reportó un incremento sustancial en el gasto de gobierno, sin embargo, al mismo tiempo, el Inegi reportó una tendencia a la baja en la inversión realizada por el mismo”. También agregó que, de igual manera, no debe dejarse de lado que ha existido un retroceso en el avance del gasto de gobierno en inversión física de sectores de atención prioritaria como salud, educación y protección social, aunado a un mayor déficit fiscal. “Por lo que resulta fundamental garantizar que en los próximos periodos la economía tenga el crecimiento suficiente para atender las necesidades de gasto y que sobre todo la mayor disposición de recursos del gobierno tenga impacto positivo y significativo en la generación de valor agregado del país”, sentenció De la Cruz.