Ventas de Mitsubishi caen a la mitad tras escándalo por alteración de pruebas

miércoles, 27 de abril de 2016 · 14:45
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El escándalo por la manipulación de pruebas sobre eficiencia de combustible en autos compactos de Mitsubishi Motors, provocó a la automotriz la reducción, a la mitad, de sus pedidos domésticos diarios. Tetsuro Aikawa, presidente de la corporación japonesa, informó sobre el desplome de ventas y reconoció que la situación es grave y “es extremadamente difícil estimar el futuro”. También debido al impacto que tendrá el escándalo, Mitsubishi aplazó la publicación de su pronóstico de ganancias para el año fiscal 2016. Además Aikawa despejó rumores sobre planes de renunciar de manera inmediata y de paso informó que tampoco lo hará el director ejecutivo de la marca, Osamu Masuko, quien era el presidente del fabricante de automóviles en 1991, cuando comenzó la manipulación de datos. Ante los reclamos para que Masuko asuma su responsabilidad en la alteración de las pruebas y dimita, Aikawa afirmó que los miembros de la presidencia de Mitsubishi nunca han intervenido en el establecimiento de los objetivos de la economía de combustible. “Haremos todo lo posible para resolver este problema tan pronto como sea posible y tomaremos medidas para evitar que se repita, con la esperanza de reaparecer en escena otra vez”, confió el presidente de la corporación. En rueda de prensa, el director general del fabricante, Yutaka Tabata, aseguró que pese al escándalo la situación financiera de la compañía “es sólida”, aunque según analistas es probable que el grupo se vea obligado a asumir “enormes costos” para compensar a sus clientes. A raíz de que Mitsubishi Motors admitió que exageró el consumo de combustible de cuatro de sus vehículos compactos, incluidos dos modelos que suministra a Nissan Motors, sus acciones han cotizado a la baja. El escándalo afecta a 625 mil vehículos, sin embargo Akinawua afirmó: “no estamos pensando en retirarnos de nuestro negocio de autos compactos en lo absoluto”. En su informe sobre la manipulación de datos presentado al Ministerio japonés de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo, la automotriz refirió que el método de prueba usado es el aprobado en Estados Unidos, pero incumple con los estándares de Japón. Tras el escándalo, la agencia estadunidense de Protección Ambiental ordenó a la compañía proporcionar información adicional sobre los vehículos implicados en la manipulación que fueron vendidos en Estados Unidos y llevar a cabo nuevas pruebas de ahorro de combustible.

Comentarios