CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) informó que la economía mexicana crecerá 3% en 2017, cuatro décimas más que el año pasado.
En su reporte de previsiones mundiales publicado este miércoles, el organismo encabezado por José Ángel Gurría –exsecretario de Hacienda de México– señala que la implementación de las reformas estructurales “es esencial y un renovado empuje puede ser necesario para luchar contra la informalidad (laboral) e impulsar los esfuerzos contra la corrupción”.
Sobre los precios, destaca que las expectativas de inflación en el país se mantienen bajas, tanto para éste como para el siguiente año.
“Se espera que el crecimiento económico repunte en 2017, ya que se desvanecen las presiones a la baja sobre la demanda estadunidense, y el amplio programa de reformas del gobierno (mexicano) comienza a detonar inversión”, advierte.
Añade: “A pesar de los menores precios del petróleo y de la demanda externa más débil, se espera que el crecimiento del PIB se fortalezca a 3.0% en 2017”.
Luego de precisar que este año el Producto Interno Bruto (PIB) de México crecerá 2.6%, el informe de la OCDE destaca que será crucial que la implementación del paquete de reformas estructurales y las próximas subastas de campos petroleros atraigan compromisos de inversión significativos.
Señala, asimismo, que la fuerte depreciación del peso en meses pasados ha tenido como resultado positivo la mejora de la competitividad de las exportaciones mexicanas, que ganaron en el caso de las manufactureras.
La depreciación de la moneda y la demanda interna resistente de México continúan siendo motores que impulsan la actividad económica del país, subraya el estudio.
“Si bien el crecimiento de la productividad ha sido débil en los últimos años, hay señales de un repunte para el cual las reformas estructurales son clave”, sostiene.
En ese sentido, la OCDE asegura que “un empuje renovado es esencial para completar el proceso de reformas y para hacer sustentable e inclusivo el crecimiento” económico.
Y afirma que “la primera ola de reformas estructurales ha llevado a importantes progresos a un amplio número de áreas, impulsando las expectativas entre los inversionistas”.