CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El peso acumuló su quinto día consecutivo con pérdidas frente al dólar, ante el incremento de la percepción del riesgo por parte de los inversionistas alrededor de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). En sucursales bancarias, el billete verde se ofertó en 19.30 unidades, mientras que, a nivel interbancario, la moneda estadunidense se cotizó en 19.03 pesos, 0.45% más caro que el cierre del pasado viernes, de acuerdo con el Banco de México (Banxico). De acuerdo con el análisis del Banco Base, el peso se colocó como la divisa con mayores pérdidas en la canasta de economías emergentes, ante un incremento en la percepción de riesgo relacionado con el proceso de renegociación del TLCAN, pues esta semana se reunirán los negociadores de los tres países en Washington DC. A estas mesas de trabajo no asistirán los ministros de México, Canadá y Estados Unidos, pues se abordarán temas técnicos. Cabe recordar que estas mesas de trabajo serán previas a la sexta ronda de la renegociación que se llevará a cabo en enero de 2018. El tipo de cambio se verá afectado esta semana ante el anuncio de política monetaria por parte de la Reserva Federal estadunidense, en el que los especialistas anticipan un incremento de 25 puntos base a la tasa de referencia a un rango entre 1.25% y 1.5%. Por su parte, el jueves el mercado también seguirá de cerca el anuncio de política monetaria de Banco de México, en el que se espera que la Junta de Gobierno suba su tasa de interés en 25 puntos base a 7.25%, ante los elevados niveles de inflación que superan el 6.5% al final del presente año. En su más reciente comunicado de política monetaria, el Banxico advirtió que entre los riesgos para la inflación está el hecho de que se registre una depreciación de la moneda nacional ante una evolución desfavorable del proceso de negociación del TLCAN o a una reacción adversa de los mercados al proceso de normalización de la política monetaria en los Estados Unidos. Adicionalmente, los precios de algunos bienes que inciden principalmente sobre la inflación no subyacente, como el gas LP o productos agropecuarios podrían aumentar.