CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, advirtió que si México quiere garantizar su estabilidad económica, debe apostar por abrir su mercado al mundo y no caer en el proteccionismo. Al participar en el panel Estabilidad Macroeconómica, Política Monetaria y Fiscal, en el marco del “Foro True Economic Talks: Afrontando el Cambio”, el encargado de la política monetaria del país sentenció: “México tiene que seguir sobre la vertiente de abrir su economía, buscar mayores resultados en el exterior y no caer en un juego proteccionista porque no sólo afectará su entorno, sino el de otras economías”. Y para no caer en una política de proteccionismo, precisó, el gobierno federal debe esforzarse más en fortalecer sus instituciones y abatir la corrupción. “Se debe fortalecer esta parte, no sólo a nivel federal sino estatal y municipal”. Actualmente, añadió, “tenemos tendencias muy complicadas y retadoras del exterior que han venido a cuestionar ciertos eventos que dábamos por dados como el Tratado de Libre Comercio (TLCAN), esto debe ser un acicate para seguir trabajando con mucho empeño”. A principios de semana, la agencia calificadora Fitch Ratings advirtió que en caso de que el líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, gane las elecciones presidenciales de 2018, ello generaría “incertidumbre y volatilidad” en el país. “Se prevé una mayor volatilidad. No anticipamos que el partido Morena tenga la victoria en el Congreso, entonces no es claro saber qué cambios habría para instrumentar las políticas de López Obrador… Claramente eso puede llevar a un nivel de incertidumbre política que tendríamos que tomar en cuenta para ver qué grado o qué cambios de políticas vamos a tener”, señaló la directora senior y jefa del Grupo de Soberanos de América Latina de dicha institución, Shelly Shetty. “Me voy tranquilo” Agustín Carstens, que dejará la gubernatura del Banco de México en noviembre próximo, aseguró que se irá “tranquilo” porque dejará la inflación encaminada al objetivo, que es de 3% (+/- un punto porcentual). “Me voy con tranquilidad de que voy a dejar a la inflación encaminada hacia nuestro objetivo”, subrayó. En abril pasado la inflación alcanzó el 5.82%, nivel muy superior al objetivo del 3%. La tendencia al alza del Índice Nacional de Precios y Cotizaciones (INPC) ha sido al alza desde enero pasado, cuando se liberó el mercado de las gasolinas, lo que provocó un aumento en el combustible. A estas alturas, el transporte público también ha tenido incremento en sus tarifas, además de otros genéricos agropecuarios, y los precios al productor han estado en niveles por arriba de la inflación, lo que obliga a las empresas a elevar los precios de sus mercancías, en gran parte por el encarecimiento del dólar. Sin embargo, para Carstens el alza en los precios del transporte “es muy discreto”, por lo que no tiene mayor impacto en la inflación. Remató: “Yo, como ya anticipé, lo que esperaría es que sobre todo hacia finales de este año la inflación empiece a tener una tendencia decreciente mucho más clara, y estoy seguro de que en el año 2018 vamos a tener una inflación por debajo del techo de nuestra banda y con altas posibilidades de que converja al 3% hacia finales de 2018”.