CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El peso no logra contener su caída frente al dólar y este martes acumuló su quinto día consecutivo con pérdidas, ante la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) estadunidense continúe elevando su tasa de interés, además de una constante baja en los precios internacionales del petróleo. En sucursales bancarias, el billete verde se ofertó en 19.45 unidades, mientras que a nivel interbancario se cotizó en 19.21 pesos, el nivel más alto en los últimos 32 días, de acuerdo con información del Banco de México (Banxico). Según el análisis del Banco Base, durante la sesión el dólar continuó fortaleciéndose de forma generalizada debido a la alta probabilidad de que la Fed suba su tasa de referencia el próximo 14 de junio, afectando a las divisas de países cuyos bancos centrales mantienen posturas altamente acomodaticias. “El peso ganó terreno durante la mañana luego de que se dio a conocer que la inflación en México se ubicó en una tasa interanual de 5.82% en abril, superando las expectativas del mercado al colocarse en el nivel más alto desde mayo de 2009. Esto hace más probable que Banco de México suba su tasa de referencia en alguno de sus siguientes dos anuncios de política monetaria programados para el 18 de mayo y el 22 de junio”, precisó el análisis. A pesar de esto, las ganancias del peso fueron sólo temporales, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 19.10 pesos por dólar durante la mañana y regresando a niveles cercanos a 19.20 durante la tarde. El panorama no es alentador para el tipo de cambio. El día de mañana se publicarán en Estados Unidos las estadísticas semanales de producción e inventarios de petróleo de la semana anterior. De observarse 12 semanas consecutivas de crecimiento en la producción, es probable que el precio del WTI continúe su tendencia a la baja hacia el nivel de 40 dólares por barril, ocasionando pérdidas para divisas de economías emergentes y de países productores de petróleo y materias primas. De hecho, hoy los precios del petróleo continuaron cayendo en la sesión después de que la EIA estimó que la producción petrolera de Estados Unidos crecerá a un ritmo de 9.96 millones de barriles al día en 2018 desde una estimación previa de 9.9 millones de barriles diarios.