La Coparmex plantea transformar la Conasami en una nueva comisión de remuneraciones
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) se pronunció por la transformación de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) al considerar que no responde a las necesidades del país en materia de política salarial.
Mediante un comunicado, el organismo presidido por Gustavo de Hoyos Walther aseguró que actualmente dicha comisión “tiene un mandato limitado, y no tiene la capacidad legal para definir y administrar una estrategia amplia de remuneraciones para el país, que vaya mucho más allá de la fijación de los salarios mínimos”.
Para el organismo patronal, hoy es el momento coyuntural para transformar a la Conasami en la Comisión Nacional de Remuneraciones (Conare), una institución que esté a la altura de los desafíos que enfrenta México y que cuente con un mandato ampliado, para desarrollar y administrar la política nacional de remuneraciones.
La Conare tendría múltiples atribuciones, que van desde la elaboración de políticas salariales y de prestaciones de largo plazo, hasta el desarrollo de propuestas de políticas tributarias que potencien el poder adquisitivo de los trabajadores.
“Estimamos que la Conare debe ser un órgano tripartito, colegiado, en el cual se desarrolle una política salarial que tome en cuenta diferentes puntos de vista. Es decir, que esté integrada por una Dirección General, y por representantes del gobierno, patronales y de los trabajadores”, explicó la Coparmex.
Asimismo, tendría objetivos de corte transversal en manera salarial. Esto es, una comisión más ambiciosa que pueda dar cumplimiento efectivo al mandato constitucional de garantizar un salario digno para los trabajadores.
De igual forma, precisó la Coparmex, es relevante que la Conare considere que la remuneración total de los trabajadores y las condiciones laborales exceden el ámbito salarial pues implican también prestaciones.
En ese contexto, el organismo patronal propuso un órgano consultivo con participación honoraria de representantes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP); el Servicio de Administración Tributaria (SAT); el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval); el Banco de México (Banxico), y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
También participarán el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit); el Instituto del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Infonacot), así como la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
“Justicia para el trabajador”
Gustavo de Hoyos Walther dejó claro que para que estas políticas se lleven a cabo de manera responsable y factible, es importante que la Conare cuente con un grupo de expertos que apoyen permanentemente el desarrollo de insumos y análisis para determinar la política salarial con base en criterios técnicos.
“La justicia social no está peleada con la técnica, y el mandato de la comisión debe ser armonizar ambos objetivos”, dijo.
Para la Coparmex, en un contexto de profundas transformaciones institucionales como el que México está atravesando, es momento de apoyar al sector más amplio de las capacidades productivas: a los trabajadores.
Desde diciembre del 1982 a la fecha, el Salario Mínimo General en México se redujo en términos reales en un 55%. Actualmente, y a pesar de los dos incrementos más recientes, solo alcanza a cubrir el 89% de la canasta alimentaria y no alimentaria de acuerdo a cifras de Coneval, es decir, se ubica por debajo de la línea de bienestar.
En términos internacionales, el salario mínimo mexicano es uno de los más bajos. Tan solo por referir nuestro entorno regional, en Latinoamérica, sólo es superior al nivel salarial de Cuba y Venezuela. De hecho, el promedio en la región es de 335 dólares mensuales, mientras que en México es de solo 142 dólares. Esa brecha salarial limita el desarrollo del país.