CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, trató de contagiar de optimismo a los inversionistas de capital privado. Al participar en el XIV Summit de Capital Privado organizado por la Asociación Mexicana de Capital Privado, el exempresario oriundo de Nuevo León, de plano soltó:

“Tenemos que hablar bien del camello. Necesitamos que todos los mexicanos, en lugar de hablar mal, hablemos todos bien o mejor de lo que hemos hecho, necesitamos crear un ambiente optimista, no podemos crear un ambiente pesimista”.

Luego justificó la falta de reacción del nuevo gobierno al decir: “¿Por qué no hemos ido más rápido? Porque heredamos un problema de corrupción y de ligereza muy fuerte, entonces hay una psicosis, yo creo que estamos reaccionando de más, me incluyo. Por la excusa de la corrupción, sin querer, estamos parando demasiado y no podemos parar”. Apenas este día, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) redujo las expectativas de crecimiento a 1.6%, igual que lo han hecho diferentes organismos internacionales que van desde el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, entre otros. Mientras que el presidente, se empeña a decir que México “sorprenderá” con el crecimiento, las cifras marcan otra realidad. Ante los dueños del capital financiero, Alfonso Romo soltó: “Lamentablemente llevamos cinco meses y medio, ya nos gustaría tener dos años para que todos estén contentos”. Inmediatamente alentó ante los inversionistas:

“México está hambriento de capital, no tiene el capital para enfrentar los retos que se nos presentan… sí tenemos la capacidad de aguantar las turbulencias, creo que México puede salir muy avante de esta situación”.

Luego dijo optimista: “México  tiene todo. Está por ratificar el tratado de libre comercio con Canadá y Estados Unidos… hay una guerra comercial con China que debemos aprovechar, muchas de esas industrias hay que traerlas para acá, ya estamos trabajando en hacerlo y en crear condiciones de crecimiento que nunca se han visto en el país”. Alfonso Romo hasta dio avances sobre las licitaciones petroleras. “En seis meses vamos a tener una reunión para ver cómo han trabajado los que ganaron, les vamos a evaluar desde el punto de vista de producción, inversión y de si realmente fue el negocio para la hacienda pública y si realmente las reguladoras están siendo más agresivas y más ágiles en los trámites y, una vez visto esto, el presidente tomará la decisión que más le convenga al país”, señaló.