Argentina: la feroz lucha interna del peronismo
Buenos Aires - Carlos Alberto Reutemann, a quien muchos en el exterior aún lo recuerdan por su paso por la Fórmula 1 y su subcampeonato mundial de 1981, lo meditó largo rato y tiró la toalla
"Vi cosas muy sucias", dijo el gobernador de la provincia de Santa Fe (centro de Argentina) para explicar por qué renunciaba a lanzar su candidatura presidencial en las primarias del Partido Justicialista (PJ), la agrupación fundada por Juan Domingo Perón y que hoy conduce el país a través de Eduardo Duhalde en la peor crisis de la historia argentina
Reutemann, un gobernador con fama de honesto y austero, es el político argentino con mejor imagen en el país Un sondeo de la encuestadora Ipsos Mora y Araujo ubicó al excorredor de autos con un 41% de imagen positiva, superando con holgura a otros políticos con aspiraciones a suceder a Duhalde tras las elecciones presidenciales del 30 de marzo
Pero el "Lole", como se lo conoce a Reutemann, se bajó de la carrera a la Casa Rosada (casa de gobierno) dando un portazo a la dirigencia política y dejando boquiabierta a una sociedad que lo veía como uno de los pocos dirigentes "potables" de un país al borde del abismo
"Vio cosas, todos sabemos qué cosas, no hace falta enumerarlas", dijo a Apro una fuente cercana al "duhaldismo", que pidió el anonimato
Es que el PJ, el mayor partido argentino con 38 millones de afiliados, vive hoy una lucha interna encarnizada, con candidatos que se odian entre sí, en veredas ideológicas opuestas y con un mandatario como Duhalde que reza a todos los santos no tener que entregarle el poder el 25 de mayo de 2003 a su archienemigo: Carlos Menem, con quien compartió la fórmula presidencial de 1989 y del que se distanció a fines de los 90
"Las internas están que arden Puede pasar cualquier cosa", resumió la fuente del PJ, que parece acorralado por el fantasma de la división
La carrera del justicialismo
Varios dirigentes del justicialismo se anotaron en la carrera por la sucesión presidencial El primero en subirse fue el exmandatario Carlos Menem, con una imagen negativa del 73%, según la citada encuesta, y que aún no termina de despegar en los sondeos
Menem lanza dardos envenenados contra Duhalde, promete dolarizar la economía argentina y volver a un pasado no tan lejano cuando en sus dos gobiernos (1989-99) Argentina era la "niña mimada" del FMI, practicando un ultra-liberalismo sin contemplaciones con eje en la convertibilidad de la moneda (1 a 1 con el dólar) que muchos economistas juzgan como gran culpable de la crisis actual
"Menem está decidido a ganar la interna (del peronismo) Tenemos mucha expectativa respecto a la posibilidad de Menem en la elección interna y en la general porque ya demostró que podía transformar una Argentina que era un lío, en una Argentina confiable", dijo el exsecretario general del gobierno de Menem, Alberto Kohan
El exmandatario, que de ganar le daría a la Argentina una "primera dama" chilena, su esposa y exmiss universo Cecilia Bolocco, aparece en un cuarto lugar en el sondeo de Ipsos Mora y Araujo con un 10% de respaldo en agosto
Si bien la intención de voto de Menem es escasa, aumentó 28 puntos desde julio, cuando reunía apenas 72% Pero el expresidente lleva una pesada carga de escándalos y denuncias en su contra, como las que lo vinculan con una millonaria cuenta en Suiza o su presunto encubrimiento en el atentado a la mutual judía argentina AMIA, ocurrido en 1994, tal como acusó un "arrepentido" iraní, cuya denuncia llegó hasta el prestigiado diario The New York Times
Según la denuncia, el gobierno de Irán habría pagado a Menem 10 millones de dólares, depositados en una cuenta en Suiza, para no investigar la supuesta "conexión iraní" en el atentado Menem pasó a la ofensiva y calificó a las denuncias como "calumnias" de sus enemigos en una época pre-electoral y prometió volver a ocupar el sillón presidencial lanzando durísimas críticas al gobierno
Pero Menem carga con el lastre de una imagen negativa del 73%, por mucho el político con peor índice de confianza del país frente a sólo 15% de imagen positiva y 12% de "regular"
"En 1988, en las internas del justicialismo, nadie daba un peso por Menem y derrotó a Antonio Cafiero, el gran favorito Un año después, arrasó en las presidenciales", recordó una fuente del entorno "menemista", también exigiendo el anonimato, como todos los "operadores" políticos peronistas en estos tiempos de internas difíciles
Los "enemigos"
Menem tiene muchos enemigos enquistados en el partido El mayor contrincante, sin dudas, es el actual mandatario Eduardo Duhalde, quien no participará de las elecciones, pero tiene su propio candidato
Según los allegados "menemistas", Duhalde había pergeñado una jugada para sacar del juego a Menem, pero le salió mal Esta "jugada" fue nada más y nada menos que el decreto presidencial mediante el cual Duhalde resolvió en junio adelantar para el 30 de marzo las elecciones previstas originariamente para el segundo domingo de septiembre del 2003
Paralelamente, convocó a elecciones internas "abiertas" en todos los partidos políticos para el 24 de noviembre Ese fue el principio del terremoto político que sacude al justicialismo
Las "internas abiertas", finalmente desechadas, preveían que cualquier ciudadano podría votar en las primarias de cualquier partido político
"Era una clara jugada del duhaldismo para sacar a Menem del tablero El presidente abrochó un acuerdo con el radicalismo de (el expresidente Raúl) Alfonsín para que los afiliados de su partido (la Unión Cívica Radical/UCR) vayan masivamente a votar contra Menem en las internas peronistas De esa manera se aseguraba el triunfo de su candidato", que muchos sostienen que es el gobernador de Córdoba (centro), José Luis de la Sota, dijo la fuente del "menemismo"
Menem fue el más acérrimo opositor a este decreto de Duhalde y dio pelea para torcerle el rumbo Hasta que el juez de la norteña Salta (en el límite con Bolivia), Abel Cornejo, declaró inconstitucional el decreto
"Acá todo el mundo comenta que la Chaya (la diputada menemista salteña María Leila Chaya) operó a Cornejo", dijeron fuentes del gobierno al diario de izquierda Página/12 "Operar" en la jerga política argentina significa lisa y llanamente "cabildear"
El gobierno consideró apelar el fallo, pero Duhalde estimó que una medida de ese tipo lo único que lograría sería dilatar el proceso electoral y postergar las primarias "No voy a postergar las elecciones", prometió en su habitual programa radial de los sábados
Finalmente, decidió lanzar un nuevo decreto a la medida del "menemismo", con elecciones "semi-abiertas" para el 15 de diciembre (tres semanas después de la fecha original) que excluyen a los afiliados de otros partidos, pero incluyen a los independientes, un proceso que el PJ ya vivió a fines de los años 90 en internas para elegir candidatos legislativos
Menem estaba exultante A pesar de que descartaba en público lanzarse por fuera del PJ, muchos allegados por lo bajo admitían esa posibilidad en caso de una ruptura total en las filas del peronismo
Los otros
Pero Menem no fue (o es) el único dentro de las filas del justicialismo que piensa en luchar por la presidencia por fuera del PJ en caso de que "no estén dadas las condiciones" para una contienda electoral "limpia"
El expresidente Adolfo Rodríguez Saá, que gobernó el país durante una efímera semana a fines de diciembre tras la renuncia de Fernando de la Rúa y que declaró la moratoria de la deuda externa, llegó a esbozar la posibilidad en varias intervenciones públicas
Rodríguez Saá, que pasó a la historia por su amplia sonrisa gardeliana en medio de la peor crisis argentina de su historia, viene "pisando fuerte" en las encuestas y es uno de los dirigentes que más ha crecido en popularidad en los últimos meses llegando a liderar el sondeo de Ipsos Mora y Araujo
El exgobernador de San Luis (centro) reunió en agosto el 163% de las intenciones de voto, según el sondeo Superó por primera vez a la candidata de la Agrupación para una República de Iguales (ARI), la diputada centroizquierdista Elisa "Lilita" Carrió", que bajó al 159%
Rodríguez Saá subió casi 6 puntos porcentuales desde la última medición de julio, mientras que Carrió bajó casi 4 puntos Incluso, el exmandatario es el segundo político con mejor imagen, detrás de Reutemann, con el 33% de nivel "positivo", contra 23% que lo define como "regular" y un 44% que lo juzga "negativo"
La Carrió, la principal rival del PJ fuera del partido, tiene una imagen positiva del 33%, 23% de "regular" y 39% de "negativa"
Con un discurso marcadamente populista, Rodríguez Saá llegó a proponer la independencia de su provincia (San Luis) por ser una de las pocas en tener superávit fiscal en el país, promete aumentos salariales de llegar al poder y tiene "contactos" de vieja data con la familia Bush, al igual que Menem, quien se define como íntimo amigo del expresidente estadounidense George Bush, padre del actual mandatario George W
Pero Rodríguez Saá no es el único que le hace "sombra" a Menem El gobernador de la sureña provincia de Santa Cruz, Néstor Kirchner, coquetea con Carrió para una eventual alianza de centroizquierda que también incluya al socialista Luis Zamora, de pasado troztkista
Kirchner está enfrentado con Menem en la vereda ideológica Considerado como eje del ala "progresista" del peronismo, el gobernador patagónico es otro de los que no descarta ir "por fuera" de la estructura partidista en las elecciones de marzo a través precisamente de una alianza con Carrió-Zamora
"La solución es profundizar la apertura y que voten todos", dijo Kirchner antes que Duhalde diera marcha atrás en su decreto de primarias partidistas que excluyó a los afiliados de otros partidos en la contienda electoral
Kirchner tiene un respaldo del 105% en el sondeo de Ipsos Mora y Araujo, y es uno de los que más creció en relación a julio cuando reunía el 44% Tiene una imagen positiva de 28% contra una regular del 31% y una negativa del 41%
"Los políticos están más preocupados para ver cómo resuelven la pelea corporativa de su partido que en tratar de aportar para la construcción de la Argentina", define su posición Kirchner
Del lado del duhaldismo todas las fichas están sobre el casillero del gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, el último en subirse a la carrera peronista por la presidencia y quien afirma que le da "vergüenza" hablar de las primarias de su partido "Hablar de las internas es hablar de los problemas de los candidatos, y no de los problemas de la gente", dijo
De la Sota esperó hasta último momento para decidir su participación en las primarias y lo hizo sólo después del retiro de Reutemann, consciente de que sólo el "voto independiente" puede llevarlo al poder
"Es el candidato de Duhalde", dicen en el "menemismo"
Duhalde lo apoya, si bien no abiertamente, ya que en público quiere mantenerse lejos de la contienda Pero no oculta sus simpatías y sus odios cuando se le pregunta si se imagina a sí mismo entregándole la banda presidencial a Menem
"No imagino esa posibilidad", dijo el presidente El encargado de responderle fue el hermano mayor del exmandatario, Eduardo Menem: "Duhalde es capaz de apoyar inclusive a un candidato de otro partido con tal de que no llegue Menem" a la presidencia, dijo
El "candidato" de Duhalde reúne apenas el 53% de los votos en agosto frente al 15% que cosechaba en julio, según la misma encuesta Su imagen positiva es de 14 %, "regular" del 29% y "negativa" del 57%, sólo superado en este último rubro por Menem
"Sus posibilidades son escasas", dijeron fuentes legislativas cercanas al "duhaldismo"
El "balotaje"
El último dirigente en discordia es el ignoto gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, que ni siquiera figura en las encuestas, pero que se hizo conocido con una propuesta "revolucionaria": dirimir la interna en las propias presidenciales de marzo a través de una especie de "ley de lemas" acotada
La iniciativa, rechazada finalmente, era del legislador Gerardo Conte Grand, que contaba con la "simpatía" del gobierno nacional, pero que necesitaba aprobarse en trámite legislativo
Se trataba de permitir la presentación de varios candidatos de un mismo partido en las elecciones presidenciales del 30 de marzo, pero cuyos votos no se sumarían entre sí como en una verdadera "ley de Lemas"
La Constitución argentina establece que para ser electo presidente se debe obtener el 50% más uno de los votos, o al menos el 45% si le saca 10 puntos de ventaja al segundo más votado En caso contrario se va a una segunda vuelta, o "balotaje", que está previsto para el 27 de abril
"Muchos están seguros de que al menos un peronista estaría entre los dos más votados y concurriría a la segunda vuelta con el respaldo de todo el PJ Incluso, hay dirigentes que piensan que así se podía meter a dos peronistas en el balotaje", fue el análisis que hizo a Apro la fuente justicialista cercana al "duhaldismo"
Pero el politólogo Sergio Berensztein dijo que esta posibilidad "puede suponer un riesgo muy grande para el PJ, ya que puede ocurrir que ningún candidato peronista alcance la segunda vuelta"
Incluso, el dirigente peronista José Pampurro llamó a convocar a un Congreso partidario para analizar una eventual suspensión de las internas y dirimir las primarias en las elecciones presidenciales como propone Romero, una propuesta que el gobierno rechaza de cuajo
Pero los sondeos de eventuales balotajes entre dirigentes peronistas y Carrió sólo favorecen a Rodríguez Saá, quien derrotaría a la diputada de centroizquierda en una segunda vuelta por el 352% de los votos contra 283%, según una encuesta del instituto Vox Populi
Menem perdería con un margen elevado (398% contra 198%), superior a una hipotética derrota de De la Sota ( 325% 252%)
Con este panorama, a dos meses de las elecciones internas, el partido fundado por Juan Domingo Perón atraviesa la peor crisis desde su fundación Detrás de las sonrisas de sus candidatos, se teje una historia de odios, venganzas, peleas, traiciones y ambiciones de poder, respetando siempre la tradición de las mejores telenovelas latinoamericanas