Cuba-EU: Los negocios fragmentan el embargo

sábado, 28 de septiembre de 2002 · 01:00
La Habana -- Cuando Alejandro Rodríguez, un ingeniero cubano de 31 años, se paró en la puerta del pabellón donde casi 300 compañías agroalimentarias estadunidenses expusieron sus productos y sus tremendos deseos de vender a Cuba, el impacto sólo le permitió articular una frase casi lapidaria: "se jodió el bloqueo, chico" Después de caminar por los estantes, apreciar los productos y saber que muchas de esas compañías vendieron alimentos a la isla por 120 millones de dólares en los últimos 10 meses, Rodríguez se hizo la pregunta que muchos se hacen actualmente en La Habana: "¿Y ahora quién los para allá? ¿Quién les dice que no pueden comerciar con Cuba?" Para seis de cada 10 cubanos que viven actualmente en la isla, La Feria de productos estadunidenses fue algo totalmente inusitado y sorprendente Desde que llegaron a este mundo han vivido bajo los rigores que impone a Cuba el embargo norteamericano de 1962 El bloqueo, como lo denominan en la isla, es parte de sus vidas Más de 750 participantes, representantes de 288 grandes compañías de 33 estados norteamericanos, legisladores federales y estatales, así como el gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, participaron en la muestra "Esto es un proyecto comercial a largo plazo Sí esto ayuda a normalizar las relaciones estaríamos muy gratificados", dijo Peter Nathan, presidente de la empresa especializada en organizar ferias PWN Exhibicon International, con sede en Wesport, estado de Connecticut, la cual recibió autorización del gobierno norteamericano para organizar la muestra en Cuba Pero la feria no cayó del cielo Es el resultado de 10 meses de intensas negociaciones entre la empresa cubana Alimport y compañías norteamericanas de varios estados, que se han materializado en compras por 120 millones de dólares en pollo congelado, huevos, harina de maíz, arroz, soya, trigo, manzanas y otros muchos renglones La historia comenzó el fatídico 11 de septiembre del año pasado, cuando Cuba fue la primera nación del mundo en dar sus condolencias a Washington, condenar los atentados terroristas y ofrecer ayuda médica Dos meses después, el huracán Michelle arrasó la mitad de la isla y dejó pérdidas por mil 800 millones de dólares Washington ofreció ayuda humanitaria por la catástrofe climatológica La Habana agradeció el gesto, pero en su lugar solicitó autorización para hacer compras puntuales de alimentos, que serían pagadas en efectivo, y transportadas en naves estadunidenses o de terceros países, para no contravenir las leyes del embargo Así comenzó la historia, y los grandes productores agroalimentarios estadounidenses, con sus almacenes repletos de excedentes, vieron la posibilidad de recuperar un mercado que una vez fue suyo, y que ahora podría tener una capacidad de compra de más de mil millones de dólares anuales "Les dieron a probar la miel, se la untaron en la boca y le dijeron aquí está, vengan por ella", comentó un diplomático europeo en La Habana Las ventas de medicinas y alimentos a Cuba fueron aprobadas en 1999, bajo la administración de Bill Clinton, pero la isla no puede obtener créditos de entidades oficiales o privadas de Estados Unidos y sus barcos no pueden atracar en puertos de ese país, debido a otras leyes del embargo El gobierno de Fidel Castro rechazó entonces comprar "ni una aspirina" en esas condiciones, impracticables en el mundo comercial actual, pero las primeras compañías norteamericanas comenzaron a manifestar interés, que se vio colmado después del huracán Michelle La voz de los negocios El controvertido gobernador del estado de Minnesota, Jesse Ventura, es el tercer gobernador en visitar Cuba con el olfato puesto en los negocios y con opiniones en contra de las leyes del embargo que los impiden Este político independiente, un exluchador que abandonó el ring para dedicarse a la política, llegó al puesto derrotando a demócratas y republicanos No tiene ninguna simpatía por Fidel Castro, pero le interesa el mercado cubano Fue precedido por los republicanos George Ryan (Illinois), quien ya ha viajado dos veces a la isla y por John Hoeven (Dakota del Norte) Esas visitas han provocado reacciones airadas en el sector radical del exilio cubano en Miami, que después de cuatro décadas de cabildeo sin resistencia en el Congreso estadunidense para aprobar leyes contra el gobierno de la isla, se ha encontrado con el escollo de un nuevo lobby, formado por los legisladores de los estados productores de alimentos El pasado 23 de julio, la Cámara de Representantes aprobó tres medidas encaminadas a aliviar el embargo La primera, dirigida a prohibir el uso de fondos federales para hacer cumplir las férreas restricciones de viajes de ciudadanos norteamericanos a Cuba, que fue aprobada 262 votos contra 167 Salvo contados casos (artistas, deportistas, periodistas y académicos) que autoriza el carril dos de la ley Torricelli, los ciudadanos norteamericanos no pueden gastar dinero en sus viajes a Cuba (por lo que no pueden viajar), so pena de enfrentar altas multas o penas de cárcel La segunda iniciativa aprobada por la Cámara (251 votos contra 177) fue la de levantar el límite de mil 200 dólares anuales de las remesas que los cubanos residentes en Estados Unidos pueden enviar a sus familiares en la isla Y la tercera: una propuesta autorizando el comercio de alimentos y medicinas con Cuba, en condiciones normales (créditos y otras facilidades), la fue aprobada a mano alzada La Cámara rechazó en cambio por 204 contra 226 una propuesta para levantar el embargo en su totalidad, así como otra, propuesta por los defensores del bloqueo (182 contra 247), condicionando el levantamiento de las restricciones a los viajes a una certificación presidencial de que Cuba no tiene un programa de armas biológicas ni patrocina el terrorismo internacional A raíz de esa aprobación, los sectores moderados del exilio cubano se movilizaron por primera vez en una campaña contra el embargo Unas 500 personas de origen cubano visitaron el 18 de septiembre las oficinas de sus congresistas en Washington para pedirles que voten a favor del fin del embargo contra la isla Entre los participantes estaba el excomandante castrista Eloy Gutiérrez Menoyo, quien cumplió 22 años de prisión en Cuba por su oposición armada a Castro y ahora dirige el movimiento Cambio Cubano Propuestas similares transitan ahora por el Senado, el cual no ha fijado fecha para su discusión, pero se espera las apruebe por una significativa mayoría El problema que enfrentan las propuestas es la negativa del presidente George W Bush a aprobarlas, pues ha anunciado su veto "El presidente ha indicado que impondrá su veto sí esa disposición figura en la versión final de la ley", dijo en julio el portavoz presidencial Ari Fleischer Se estima que la oposición de Bush está sustentada por el próximo período electoral en el estado de la Florida, donde su hermano Jeb aspira a reelegirse gobernador y precisa de los votos del sector radical del exilio cubano Por ello no se descarta que el Senado transfiera la discusión para después de las elecciones En esas condiciones, varios políticos norteamericanos afirman que si no se aprueban este año, será en el próximo, cuando el presidente tenga menos motivos para vetarlo, o puedan incluso superar el veto presidencial por una mayoría de dos tercios del legislativo Los cubanos, por su parte, están convencidos de que el bloqueo se desmoronará poco a poco, en un proceso en el cual la práctica de la vida vaya delante de las leyes El razonamiento no es infundado La madeja de leyes que forman el embargo comenzó a tejerse en 1961 y terminó un año después En 1992 fue fortalecido con la ley Torricelli y en 1996 con la ley Helms-Burton Según los más recientes cálculos del gobierno cubano, las afectaciones a la economía de isla por los rigores del embargo superan los 70 mil millones de dólares en las cuatro décadas Esa cantidad es cuatro veces el Producto Interno Bruto de la isla y seis veces el monto de su deuda externa No están contemplados los 54 mil millones de dólares reportados como daños directos ocasionados a objetivos económicos y sociales debido a sabotajes y actos terroristas, indicó un reciente informe oficial de 24 páginas dirigido al Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan El documento es la base para la resolución "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos de América contra Cuba", que el gobierno presentará en las próximas semanas ante la Asamblea General del organismo Esa resolución, presentada anualmente por Cuba desde 1992 ha sido aprobada por la Asamblea General por creciente margen, marcando el rechazo de la comunidad internacional por el embargo En el 2001, la resolución fue aprobada por 167 países a favor, tres en contra, 16 abstenciones y tres ausentes Según el texto del informe, el embargo "ha sido recrudecido por decisión del actual gobierno de George W Bush, quien ha hecho de la retórica anticubana y de fuertes compromisos asumidos con los grupos extremistas con sede en Miami, el fundamento de sus acciones contra en Cuba en busca de beneficios electorales para sí y su familia" Pero la respuesta realista sobre el futuro del embargo parece estar en un informe del Centro de Política Internacional de Estados Unidos, dado a conocer el 15 de julio pasado Según el texto, el levantamiento de las prohibiciones de viajes de ciudadanos norteamericanos a Cuba significaría una expansión a la economía norteamericana de mil 182 millones de dólares anuales y la creación de entre 16 mil 800 y 23 mil nuevos puestos de trabajo Por su parte, la Cuba Policy Foundation dijo en enero de este año que la economía estadounidense pierde anualmente hasta mil 240 millones de dólares en exportaciones agrícolas debido al embargo Las pérdidas pueden sumar 3 mil 600 millones de dólares si se consideran sus efectos colaterales en la economía de Estados Unidos, según ese estudio realizados por los profesores C Parr Rossen y Flynn Adcock, expertos en economía agrícola de la Universidad de Texas

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