Durante la crisis financiera de 1995 Estados Unidos ayudó a México porque era correcto, pero también necesario La interdependencia es el punto y la base fundamental del TLCAN; por lo tanto ambos países tienen que negociar y en algunos casos ceder Las responsabilidades de México deberían ser: crear bases sólidas para el desarrollo económico y centrarse en el avance de la economía interna; en política exterior, abrirse y buscar inversión extranjera Las de Estados Unidos, ayudar a países en vías de desarrollo, poner atención a la migración, fortalecer las instituciones bilaterales y reconocer que las decisiones unilaterales crean problemas Tales son las tesis que maneja el siguiente texto escrito por el expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, y que la revista Foreign Affairs en español publica en su edición enero-marzo de este año Bill Clinton Carlos Fuentes, el gran escritor mexicano, que además es amigo mío, siempre me recordaba que en México el pasado siempre está presente Pero también que el futuro siempre está vivo México es un país singular, en el cual confluyen presente, pasado y futuro México siempre ha sido un foco de gran peso en los hechos del mundo entero Cuando me tocó hacer esfuerzos para ayudar a México durante su crisis financiera de 1995 lo hice porque era lo correcto, y porque era lo que tenía que hacerse Pero también lo hice porque sabía que si México fracasaba, ello podía, de alguna manera, haber afectado gravemente a Estados Unidos Sabemos que entre 1993 y el día de hoy el comercio entre México, Estados Unidos y Canadá se ha más que duplicado Al mismo tiempo, las exportaciones de Estados Unidos a México y a Canadá también se han más que duplicado Uno de los momentos creativos de la globalización de los últimos años se dio con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte El punto fundamental en que se basa un acuerdo como éste, es el reconocimiento de que de todas las fuerzas socioeconómicas que imperan en el mundo la más importante es la interdependencia Es nuestra gran bendición y nuestro gran desafío Ya no es momento de erigir bardas ni fronteras, ni tampoco de abstenerse de tomar decisiones y emprender acciones La interdependencia, por sí misma, no es ni buena ni mala, y de hecho, para la mayoría de los países, es ambas cosas Puede ser buena y puede ser mala El gran impulso que experimentó México durante la década de los 90 provino del comercio, pero de alguna manera lo que ocurrió el 11 de septiembre (de 2001) también fue consecuencia de la interdependencia Durante los ataques hubo víctimas de unos 70 países, más de 15 fueron mexicanos que trabajaban en las torres gemelas de Nueva York Sí, ésa es la faceta negativa de la interdependencia, aunque hay otras que no lo son De 1993 hasta el año 2000, en Medio Oriente hubo una interdependencia que se pudo calificar como positiva En esa misma línea de pensamiento de la interdependencia agridulce, el levantamiento palestino, la Intifada, pueden ser calificados como una interdependencia negativa Lo triste de la situación de Medio Oriente es que muchas generaciones nuevas están muriendo debido a las acciones y actitudes de otras generaciones, más viejas, que creen que la interdependencia sólo puede ser negativa Puedo darles muchos ejemplos, pero la realidad es que la globalización, para bien o para mal, está redimiendo a más pobres que nunca antes en la historia También es verdad que hay mucha gente en el planeta que gana menos de un dólar al día; de hecho, más de mil millones de personas en el mundo se van a dormir todas las noches sin probar bocado Las dos sendas Ya se ha logrado descifrar el código del genoma humano Sin embargo, millones de niños morirán, y esto es lo triste, por enfermedades que se podrían haber curado Hay de 120 a 130 millones de niños que ni siquiera asisten a la escuela Es casi como si en el mundo de la globalización hubiera dos caminos o sendas: uno, una senda positiva por la cual irán generaciones a un futuro luminoso; pero hay otra senda que las llevará a otros a través de la amargura y la tristeza De alguna manera, todas las naciones del mundo tienen ejemplos de interdependencia positiva y negativa En Estados Unidos hay mucha riqueza, pero también, como indican las estadísticas, más de cinco millones de personas perdieron su seguro médico y cayeron por debajo del nivel considerado de pobreza Incluso en Europa, donde son tan civilizados y pacíficos, en los Países Bajos y en Suecia ha habido atentados contra dirigentes políticos México no es la excepción, y en ese contexto está claro, para alguien como yo que observa a este país con interés, que está tratando de superar los desafíos impuestos por las nuevas realidades políticas Si se cree que la interdependencia es la principal característica de las postrimerías del siglo XX y los albores del siglo XXI, también se tendrá que estar de acuerdo en que impone sus propios desafíos Muchas personas se me acercan para decirme que la reconciliación total entre todos los países del mundo, habida cuenta de las diferencias raciales, culturales y hasta religiosas, es casi imposible Sea como sea, lo que sí sé es que si uno vive en un ambiente de interdependencia, tiene que negociar, de alguna manera, y, en ciertos casos, ceder Todas las personas merecen tener una oportunidad Asimismo, todos deben ser conscientes de sus responsabilidades Si bien la competencia es buena, es mucho mejor si todos trabajamos en equipo Nuestras diferencias son importantes, hacen la vida interesante, pero el bien común de la humanidad es la mayor prioridad Consejos para México Pero ¿qué importancia, qué significado, tiene la interdependencia entre México y Estados Unidos? Primero, México y otros países en vías de desarrollo tienen dos responsabilidades en cuanto a la interdependencia: las responsabilidades internas que implican el establecimiento de políticas económicas y políticas de bases sólidas para el desarrollo económico Creo que todas las iniciativas de reformas económicas y políticas que está tratando de impulsar el presidente Vicente Fox son muy importantes porque, de alguna manera, habrán de contribuir a la confianza colectiva El segundo punto que quiero señalar es que tiene que darse un mayor énfasis al crecimiento de la economía interna Ya mencioné que creo en los beneficios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, pero en 1980, cuando Japón estaba en camino de dominar el mundo en el terreno comercial, era la mayor potencia en términos comerciales, y sin embargo 80% de los ingresos de los japoneses se generaba en el plano interno Alemania, por ejemplo, era la potencia comercial de Europa, pero la mayor parte del ingreso se generaba también en el plano interno Uno de los temas en los cuales coincido con otro de mis amigos mexicanos, Carlos Slim, es que México debe esforzarse en impulsar el crecimiento económico interno Todo país en vías de desarrollo debe fortalecer sus clases medias, y ello mediante el crecimiento económico interno, y mediante el fortalecimiento de las instituciones encargadas de la aplicación de la justicia El secretario del Tesoro de Estados Unidos solía decir unas palabras que servían de alguna manera para analizar la situación política: No se puede administrar una economía si no hay responsabilidad fiscal Añadiría un tercer punto que quiero destacar: Cada país en vías de desarrollo tiene que comprometerse con el desarrollo sustentable en relación con la naturaleza En el campo de la política interna, la solución consiste, primero, en tener democracia y, segundo, en reconocer que la democracia implica decisiones Los partidos políticos son los vehículos para expresar las convicciones en cuanto a la organización de movimientos que traten de afectar el devenir político; pero, a fin de cuentas, es preciso tomar decisiones, y muchas veces tienen que aceptarse ciertos compromisos La política no necesariamente es algo malo o vergonzoso; y la negociación y el acto de ceder no son necesariamente algo negativo Nadie tiene la razón todo el tiempo La esencia de la democracia consiste en no imponer la voluntad de unos sobre la de los demás La negociación es la forma adecuada de proceder Hablando de política exterior, creo que los países en vías de desarrollo, en especial México, tienen que encaminarse a la apertura y a la búsqueda de la inversión extranjera Es cierto que Estados Unidos debe ser consciente de sus responsabilidades en este siglo XXI, y estar comprometido con ellas, y saber que es imperativo e inevitable ayudar a los países en vías de desarrollo, pero lo que ya hace la Unión Americana es contribuir de una manera efectiva a la economía mundial Estados Unidos representa 22% del crecimiento internacional y Estados Unidos ha logrado buenos resultados en lo que concierne al comercio exterior, pero admitámoslo, no ha hecho un gran trabajo en cuanto a ayuda a otros países En este sentido, cobra especial importancia el asunto de la migración; Estados Unidos tiene que elaborar legislaciones adecuadas para llegar a acuerdos con México en este tema También es importante fortalecer las instituciones bilaterales Debemos colaborar y unir esfuerzos contra el terrorismo Estados Unidos reconoce el problema que implica la toma de decisiones unilaterales El problema que enfrenta el actual gobierno de mi país es que, si se llega a un acuerdo para la cooperación con otras naciones, tampoco debe tratar de dirigir todas las decisiones que competan a otro país Podemos ver en los encabezados de los periódicos noticias sobre el programa atómico de Irán, y ello es motivo de preocupación, y sobre el arsenal nuclear que tiene Corea del Norte, pero estaríamos en una posición mucho más débil si actuamos solos Cada país tiene que decidir si, al entablar una negociación, se gana o se pierde A veces se necesitan instituciones más que gobiernos para poner en práctica las iniciativas En resumen, creo que México necesita crecimiento interno, reformas, atracción de inversiones Estados Unidos necesita una política que de alguna manera amplíe los horizontes Debe ayudar más y no regresar al proteccionismo; debe fortalecer las instituciones de cooperación internacional en materia de educación, atención médica y seguridad Creo que si hacemos esto habrá un futuro promisorio, y sí, soy optimista