Las ambiciones de Blair
LONDRES, 16 de enero (apro) - El exprimer ministro británico,Tony Blair, hace campaña para convertirse en el primer presidente de tiempo completo de la Unión Europea (UE)
Sin embargo, enfrenta críticas por haber cobrado al menos unos 23 millones de dólares desde su salida del gobierno británico, en julio de 2007, en costosas ponencias, charlas y seminarios internacionales sobre temas de seguridad, medio ambiente y paz mundial
Blair, quien desde que abandonó el poder logró amasar cinco propiedades en Inglaterra, con un valor que supera los 30 millones de dólares, también es cuestionado por su falta de dedicación al cargo de representante especial en Oriente Medio del Cuarteto (ONU, Estados Unidos, Unión Europea y Rusia), justamente en medio del sangriento conflicto por la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, que inició el pasado 27 de diciembre
Fuentes diplomáticas europeas citadas por el periódico londinense Financial Times el pasado 12 de enero, indicaron que Blair "es un fuerte candidato" para conseguir el máximo puesto en la Unión Europea, siempre y cuando todos los Estados ratifiquen el Tratado de Lisboa
A Blair lo beneficia su íntimo amigo en Europa, el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, con quien comparte ideas neoliberales y quien, coincidentemente, está al frente de la Unión Europea
Sarkozy está de acuerdo con que el bloque cuente con un presidente de tiempo completo Hasta ahora, la presidencia de la UE es temporal y rotatoria
Aunque Blair tiene muchas oportunidades de ocupar el máximo puesto en la UE, enfrenta también mucha oposición dentro de la Comisión Europea (CE), debido a su excesiva proximidad con el presidente saliente de Estados Unidos, George W Bush, y por su papel central en la guerra de Irak
También es criticado por su habilidad para apoyar en público a la Unión Europea, mientras en su país se muestra reacio a hablar acerca de un mayor acercamiento a Bruselas, debido a la oposición del electorado británico a esta última opción
Otro de los escollos que debe sortear el exprimer ministro británico son las críticas a sus actividades privadas Y no es para menos:
El pasado 11 de enero, el semanario inglés The Sunday Times publicó una investigación sobre las cuentas y actividades personales de Blair De acuerdo con ese informe, el exjefe del gobierno británico ha cobrado unos 23 millones de dólares desde su salida de la residencia oficial de Downing Street, gracias a sus ponencias internacionales sobre temas de seguridad, medio ambiente y paz mundial
El reporte destacó, además, que las próximas actividades de Blair incluyen una conferencia sobre cambio climático en Abu Dhabi, el 21 de enero, una charla universitaria en Boston, el 2 de febrero, y una ponencia en un teatro de California, donde las entradas se están vendiendo a 380 dólares cada una
Blair se ha convertido en uno de los conferencistas más costosos del mundo (junto con el expresidente estadunidense, Bill Clinton, y el exvicepresidente Al Gore), y llega a cobrar unos 250 mil dólares por ponencias de sólo 90 minutos de duración
Además, percibe unos 3 millones de dólares al año por su trabajo como "consejero especial" del banco estadunidense JP Morgan Chase y otros 750 mil dólares por "asesorar" a los Servicios Financieros de Zúrich, en Suiza, sobre qué medidas tomar ante la actual crisis económica global
Blair espera también recibir otros 7 millones de dólares por el contrato para publicar su próxima autobiografía, en la que hablará sobre su paso por el gobierno y su relación con el presidente Bush, entre otros temas
El exmandatario está lucrando con su historial tras haber presidido una era política de más de 10 años en Gran Bretaña, indefectiblemente marcada por los errores de su administración en Irak y Afganistán, por una política exterior demasiado cercana a la de Estados Unidos, y por la alienación del electorado gracias a las medidas draconianas de seguridad y antiterroristas en el país
En mayo de 1997, Blair ganó las elecciones generales con una mayoría de votos nunca vista desde la Segunda Guerra Mundial, que le permitió obtener 179 escaños en la Cámara de los Comunes, algo no visto desde 1935 Además, se convirtió en el primer ministro británico más joven desde 1812, con sólo 43 años de edad
Su permanencia en el poder y sus contactos políticos ayudaron el primer ministro a enriquecerse De hecho, en noviembre de 2007 Blair pagó 7 millones de dólares por una lujosa propiedad en el exclusivo barrio de Connaught Square, en pleno centro de Londres A comienzos de 2007, él y su esposa adquirieron otra propiedad aledaña, valuada en 16 millones de dólares
Además de sus actividades comerciales privadas, el exprimer ministro busca mantener el poder en el plano internacional
Sin embargo, ello le ha traído muchos dolores de cabeza, principalmente por su presunta falta de dedicación al cargo de representante en Oriente Medio del Cuarteto, y su enfoque en los seminarios internacionales
Justamente en ese sentido, Dumisani Kumalo, embajador de Sudáfrica en las Naciones Unidas, declaró el pasado 8 de enero a la radio 4 de la BBC de Londres, que a Blair se le pidió en octubre pasado que diera una ponencia en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el progreso logrado en Oriente Medio, "y hasta ahora no ha hecho nada, ni siquiera viajó a Gaza"
"Le pedimos al Consejo que invite a Tony Blair para que dé su reporte, como todos los otros enviados del secretario general reportan al Consejo de Seguridad El debate iba a ser cuándo Blair viajaría a Nueva York Lo último que escuchamos es que vendría (este año) Esto es muy controvertido", dijo Kumalo
"Queremos saber qué ha hecho Blair en Gaza, qué está haciendo el enviado del Cuarteto a la región Hasta ahora no ha pisado Gaza Han pasado tres meses (desde el pedido)", continuó molesto
Según la investigación del Sunday Times, durante sus visitas a Oriente Medio en 2008, Blair alquiló todo un piso en el hotel American Colony de Jerusalén para él y su equipo, a un costo de un millón de dólares
Sin embargo, no todas parecen ser críticas para el exmandatario, quien el pasado 13 de enero recibió ?cinco años después de haber sido elegido-- la mayor condecoración de Estados Unidos a un ciudadano civil, la medalla presidencial de la Libertad, de manos del presidente George W Bush, por su decisión de invadir Irak
Blair, uno de los principales aliados de Estados Unidos, especialmente por la invasión iraquí después de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Washington y Nueva York, recibió el galardón en una ceremonia en la Casa Blanca durante la última semana de su fiel aliado Bush al frente del gobierno
El exprimer ministro británico recibió la medalla junto al expremier australiano John Howard y al presidente colombiano Álvaro Uribe
Entregada por el presidente de Estados Unidos, la presea fue instaurada en 1945 por el presidente Harry Truman (1884-1972) para reconocer los esfuerzos de los ciudadanos civiles durante la Segunda Guerra Mundial Blair recibió ese honor en julio de 2003, poco después de la invasión de Irak, aunque no la obtuvo en persona
Durante la ceremonia, Bush honró a Blair, Howard y al presidente Uribe "por sus esfuerzos para promover la democracia, los derechos humanos y la paz en el mundo" Y se refirió en especial al exmandatario británico: "La verdad es que sentí una conexión cercana", dijo
"El exprimer ministro de Gran Bretaña quedará bien parado en la historia Y hoy Estados Unidos de América honra orgullosamente a su amigo galante", señaló el presidente estadunidense durante la ceremonia
En su estancia por la capital de Estados Unidos, el exprimer ministro británico recibió además la medalla de oo del Congreso, que le fue concedida en 2003 en reconocimiento a su "lucha certera contra la maldad"
Sin embargo, David Manning, exembajador británico en Washington de 2003 a 2007; y desde 2001, consejero en temas de exterior de Blair, admitió en su autobiografía que hubo dificultades muy serias para que el exprimer ministro recibiera la medalla cuando aún estaba en su cargo
"Irak fue siempre un tema muy espinoso En Washington sabían que Blair tenía una imagen bastante desgastada por la invasión de Irak y podía traer mala prensa", escribió el exdiplomático en su libro La Era Blair
Manning fue justamente el diplomático que autorizó el llamado "memo manning" que resumía los detalles de una reunión en enero de 2003 entre Bush y Blair antes de la invasión a Irak
Tony Blair tiene una cercana relación con Hillary Clinton, designada secretaria de Estado por Barack Obama, y quien le podría proveer de buenos contactos al exjefe del gobierno británico en la nueva administración que iniciará el próximo 20 de enero
Otro problema que parece inquietar a muchos en Europa es el cada vez mayor fanatismo religioso de Blair, quien se convirtió a la Iglesia católica en junio de 2007, después de haber abandonado la jefatura del gobierno británico
Al respecto, el antiguo líder justificó su decisión de convertirse al catolicismo después de renunciar a su cargo, y dijo que de haberlo hecho antes habría sido acusado de "loco"
En una entrevista con la radio 1 de la BBC, el pasado 13 de diciembre, para el programa "Christmas Voices", Blair negó que haya postergado su conversión religiosa por temor a enfrentar serios inconvenientes con su investidura de primer ministro de Gran Bretaña; y admitió haber asistido a misas católicas desde hacía 25 años, como también haber educado a todos sus hijos en esa religión, antes de convertirse él mismo en 2007
Sin embargo, la BBC indicó que muchos católicos británicos sintieron que la influencia de enseñanzas cristianas disminuyó durante el gobierno de Blair, principalmente por su decisión de invadir Irak y por haber llevado a tropas a la guerra en Kosovo, Sierra Leona, y Afganistán
Para muchos británicos, las políticas de Blair estuvieron en contra de los preceptos de la Iglesia católica, agregó la cadena estatal en su programa
Su conversión al catolicismo se produjo en junio de 2007, cuando en vísperas de ceder el poder a Gordon Brown viajó al Vaticano para entrevistarse con el Papa, Juan Pablo II, por tercera vez en cuatro años
De haberse convertido antes, habría sido el primer católico en asumir la jefatura de gobierno, en un país donde todavía existe una barrera legal para que el monarca, su cónyuge y sus herederos sean católicos
Además de su conversión al catolicismo, otro aspecto que preocupa en Bruselas es una supuesta ayuda secreta de Blair al magnate de las comunicaciones Rupert Murdoch, para que éste lograra superar las dificultades impuestas por una investigación oficial que amenazaban sus inversiones financieras
Según un memorando de Downing Street, reproducido el pasado 1 de noviembre por el periódico inglés The Guardian, cuando Blair ocupaba su cargo en el gobierno, ordenó de inmediato a sus funcionarios ayudar al australiano Murdoch, quien temía que varios de sus contratos lucrativos fueran bloqueados por una investigación europea El entonces premier británico le dijo al magnate de los medios que él "instintivamente apoyaba" sus objetivos
El multimillonario australiano eventualmente logró el apoyo para sus planes, que incluían una sociedad entre la cadena BSKYB y otras grandes compañías para desarrollar un plan interactivo en el que los televidentes pudieran hacer compras y manejar sus finanzas a través de la televisión
El memorando fue el primero en ser publicado bajo la Ley de Libertad de Información, e incluyó detalles de reuniones secretas entre Blair y Murdoch, durante 2001 y 2007
El exprimer ministro había sido fuertemente criticado por la oposición conservadora y por sus propias filas laboristas por haber hecho favores políticos al magnate australiano, a cambio de recibir apoyo editorial de los principales diarios de Murdoch, entre ellos el The Times y el tabloide The Sun, el matutino más leído en Gran Bretaña
Ese documento reveló, por ejemplo, un episodio ocurrido el 7 de diciembre de 1998, un año después de la "conversión" del Sun al Laborismo, en el que Murdoch pidió favores políticos a Blair temiendo que una comisión de la UE paralizara sus lucrativos negocios
Como consecuencia de ese encuentro, el entonces jefe del gobierno convocó a una reunión de emergencia dos días más tarde con sus principales funcionarios, entre ellos el polémico secretario de prensa Alastair Campbell, y su jefe de personal, Jonathan Powell, a quienes les pidió que salieran en ayuda del empresario, siempre según esa investigación