MÉXICO, D.F., 7 de abrl.- Más de 40 muertos y 400 heridos dejó un enfrentamiento entre opositores al gobierno y policías en la provincia de Bishkek, Kirguistán, al suroeste de Asia. Los manifestantes exigían la renuncia del presidente Kirguistán, Kurmanbek Bakiyev, quien huyó en avión este miércoles de Bishkek.

En la capital, los opositores tomaron el control de la presidencia y formaron “su propio gobierno” según Temir Sariyey, líder de la oposición, en un mensaje radiofónico.

Las revueltas en Bishkek son la cúspide de las protestas en las que acusan al presidente de Kirguistán de constantes violaciones a los derechos humanos, autoritarismo y del alza a precios en productos y servicios básicos.

La policía antimotines intentó disuadir a los manifestantes con gases lacrimógenos y bombas de humo. Los opositores respondieron con rifles automáticos y proyectiles de metal.

Los manifestantes también han tomado el control del canal estatal KTR, según medios locales. En otros tres poblados, los manifestantes han asaltado edificios gubernamentales.