Teme Europa que crisis libia aliente tráfico de armas hacia Al Qaeda
MADRID (apro).- Los ministros del Interior europeos del Grupo de los Seis (G-6), más Estados Unidos, expresaron su preocupación de que la crisis en Libia aliente el tráfico de armas hacia Malí y Níger, para beneficiar a Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
El vicepresidente español y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, advirtió que Europa deberá actuar rápido y coordinadamente en caso de que se confirme el equipamiento de armas a la red terrorista en esa región de África del Norte.
Los ministros de Interior de España, Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y Polonia, así como la secretaria de Seguridad Interior de Estados Unidos, Janet Napolitano, se reunieron hoy en el Palacio del Pardo para analizar el escenario del norte de África y la región del Sahel.
Centraron sus esfuerzos en analizar el tema del terrorismo en el norte de África y tratar temas sobre delincuencia organizada.
En rueda de prensa posterior al encuentro, Rubalcaba explicó que AQMI es una red terrorista derivada de los salafistas argelinos, que se expandió desde 2008 hacia Malí, Mauritania y Níger –región del Sahel–, y “que está activa y no se descarta que salga de su espacio natural”.
Añadió: “Hay un problema con los tuareg (la tribu del Sahara) que vuelven de Libia con armas que salen de allí hacia Malí y, si no activamos planes, AQMI puede aprovechar eso para crecer y, si crece, puede crear más inestabilidad, crimen organizado y riesgos para Europa y Estados Unidos”.
Dijo que los cuerpos de seguridad e inteligencia europeos y estadunidense conocen bien a AQMI y lo que “nos preocupa es que la crisis en Libia tiene influencia en la posible aparición de armas del Ejército libio en manos de los terroristas por tráfico de armas entre Libia y Malí; esas son armas sofisticadas y representan un peligro para la zona del Magreb”.
Recordó que los países del G-6 tienen políticas de cooperación con las naciones del Magreb y del Sahel africano, pero además esos países tienen sus propias políticas de defensa, por lo cual se pretende reforzar esa seguridad ante eventuales riesgos.
Dijo que el G-6 trabaja actualmente dentro de un grupo internacional antiterrorista en el Sahel, que acelerará sus trabajos para presentar los informes necesarios ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Rubalcaba explicó que uno de los renglones de cooperación de las naciones europeas y Estados Unidos es darle seguimiento al dinero del crimen organizado que opera en la región.
“La estrategia es buscar el dinero, por si se quiere blanquear, y ello significa estar encima del blanqueo y estar encima de activos en los que se interviene”, afirmó.