MADRID (apro).- El vicepresidente primero, ministro del Interior y portavoz del Ejecutivo español, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció hoy que en breve abandonará el gobierno para asumir la candidatura socialista con miras a contender en las próximas elecciones generales. En conferencia de prensa, tras la reunión del Consejo de Ministros, Rubalcaba dijo que abandona sus cargos gubernamentales y sólo conservará su escaño como diputado del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), cuyo Comité Federal lo ungirá como candidato este sábado 9. El inminente abanderado socialista es un político de gran trayectoria política: ocupó diversos cargos en el gobierno de Felipe González, fue portavoz parlamentario del PSOE y hasta ahora era el político más influyente del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. El vicepresidente trasladó al presidente su intención de abandonar el Ejecutivo, y será éste quien decida el momento del cambio, que podría ser a partir del lunes 11. Rubalcaba aseguró que desde el pasado 28 de mayo, cuando el Comité Federal del PSOE lo designó como candidato, le comunicó a Rodríguez Zapatero que renunciaría a sus cargos el día de su nombramiento oficial “Formalmente todavía soy vicepresidente, políticamente ya no”, dijo Rubalcaba, quien aclaró que hasta el momento “no ha habido incompatibilidad” entre sus labores de gobierno; no obstante, dice que “a partir de ahora mi compromiso como candidato sí dificultaría mi tarea en el gobierno”. Asimismo, apeló a su forma de entender “los tiempos y las formas” en la actividad política para explicar su decisión de dejar sus responsabilidades en el gobierno en este momento. “Si ahora me quedara, no podría realizar como quiero mis funciones como ministro”. La víspera, el vicepresidente dio a conocer su nueva imagen como candidato, con un microsite en el que destacarán las nuevas herramientas informáticas, en especial las redes sociales de Facebook y Twitter. La expectación sobre el discurso de Rubalcaba, este sábado, se debe a que en él definirá su nuevo “proyecto para el país”, al grado que el propio Rodríguez Zapatero declaró un día antes sobre la importancia que tendría ese mensaje. En España persiste el debate de un posible adelanto electoral, como lo demanda el Partido Popular (PP), mientras que el mandatario español se niega a ello, y ha anunciado que pretende terminar su periodo de gobierno hasta el mes de marzo. De darse un eventual adelanto de las elecciones, éstas podrían realizarse en octubre o noviembre, según analistas políticos.