Muere en prisión el exdictador argentino Jorge Rafael Videla
MÉXICO, D.F. (apro).- El exdictador argentino Jorge Rafael Videla, condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad, murió este viernes a los 87 años de edad en el penal de Marcos Paz, Argentina.
Gloria Pando, esposa del exmilitar, dijo a distintos medios que se enteró del deceso de Videla por la cónyuge de un detenido que estaba con él en prisión.
"Anoche no se sentía bien. Lo llevaron al hospital que hay dentro del penal, pero no tenía nada y lo volvieron a llevar a su celda. Esta mañana, cuando hicieron el recuento de los detenidos, no estaba, y cuando fueron a ver a su celda lo encontraron muerto", dijo Pando a la estación de radio Once Diez de Buenos Aires.
A otra estación, Cadena 3 de Córdoba, le dijo que Videla no tenía un problema específico de salud, pero que estaba aislado “porque había un rumor de que lo iban a matar”.
El diario El Clarín dio otra versión: que falleció en el baño del pabellón de lesa humanidad de la cárcel de Marcos Cruz, y según el reporte de la agencia estatal Télam, que citó una confirmación del Servicio Penitenciario, murió de causas naturales.
Desde la noche del jueves el exdictador empezó a sentir dolores estomacales. Esta mañana –alrededor de las 6:30– se levantó y, cuando ingresaba al baño, cayó al piso y falleció.
Videla cumplía una condena de 50 años por 35 casos de robo de bebés a prisioneras políticas en las maternidades clandestinas que funcionaron en los centros de detención y exterminio de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), Campo de Mayo, Pozo de Banfield, La Cacha y Comisaría 5ta de La Plata, entre otros.
El juicio comenzó por una denuncia de Abuelas de Plaza de Mayo —un grupo que lucha por encontrar a los hijos de los asesinados durante la dictadura argentina—, luego de confirmarse la existencia de un plan sistemático de apropiación de menores durante el régimen militar.
Según las Abuelas de la Plaza de Mayo, al menos 500 niños fueron robados, y a la fecha el grupo ha resuelto 108 casos.
La pena a Videla fue dictada por el Tribunal Oral Federal Nº 6 y se sumó a otras anteriores.
En 2010 fue condenado a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad cometidos contra 31 presos políticos durante la dictadura militar.
Videla murió antes de ser juzgado por un tercer caso: supuestos crímenes cometidos durante el Plan Cóndor, presuntamente coordinado entre varias dictaduras de América Latina para la persecución de opositores.
Según organismos de derechos humanos, durante el régimen militar argentino desaparecieron alrededor de 30 mil personas.
En abril del año pasado, los diarios argentinos La Nación y Perfil publicaron declaraciones del exdictador al escritor Ceferino Reato, quien escribió un libro sobre la dictadura militar (de1976 a 1983).
Videla confesó al escritor que ordenó la desaparición de las víctimas de la represión para no provocar protestas dentro y fuera del país.
“No había otra solución. Cada desaparición puede ser entendida ciertamente como el enmascaramiento, el disimulo de una muerte”, admitió.
Además confesó que la cúpula militar estaba de acuerdo con los asesinatos y posterior desaparición de los cadáveres.
“Eran el precio a pagar para ganar la guerra contra la subversión y necesitábamos que no fuera evidente para que la sociedad no se diera cuenta”, argumentó.
Esa estrategia era parte del Proceso de Reorganización Nacional, con el que llegó al poder.
“Había que eliminar a un conjunto grande de personas que no podían ser llevadas a la justicia, ni tampoco fusiladas”, dijo.
También reconoció que hizo desaparecer cuerpos de personas muertas en tiroteos, como el del jefe del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), Mario Santucho.
Videla, un ser despreciable
La mañana de este viernes, Estela Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, dijo que estaba tranquila por la muerte del exdictador, a quien calificó como “un ser despreciable”.
"Fue juzgado y condenado, está claro quién fue este personaje, hay hombres buenos y hay hombres malos, él es un hombre malo", dijo al canal Todo Noticias.
En una carta que envió la organización al Papa Francisco en abril pasado, para solicitarle su ayuda para localizar a los desaparecidos, las Abuelas de la Plaza de Mayo, señalaron:
"La dictadura no solo aniquiló a nuestros hijos y se robó a nuestros nietos, sino que además disolvió todas las pruebas que nos permitirían saber qué hicieron con ellos".
Trayectoria militar
Videla nació en Mercedes, provincia de Buenos Aires, el 2 de agosto de 1925. Llegó a la Presidencia a través del golpe militar que depuso a María Estela Martínez de Perón el 24 de marzo de 1976, y ocupó ese cargo hasta 1981.
Tras la recuperación de la democracia, en 1983, fue juzgado y condenado a prisión perpetua y destituido del grado militar por numerosos crímenes de lesa humanidad cometidos durante su gobierno.
Su formación militar la inició en el Colegio Militar de la Nación el 3 de marzo de 1942. Se graduó el 21 de diciembre de 1944 con el grado de Subteniente de infantería y fue el 6º de la promoción 73ª sobre un total de 196 cadetes.
Cursó la Escuela Superior de Guerra entre los años 1952 y 1954 y se licenció con el título de Oficial de Estado Mayor. Formó parte de la Secretaría de Defensa entre 1958 y 1960, y dirigió la Academia Militar hasta 1962. En 1971 fue ascendido a general de brigada y nombrado por Alejandro Agustín Lanusse como director del Colegio Militar de la Nación.
A fines de 1973 el comandante Leandro Anaya lo nombró jefe del Estado Mayor del Ejército, y el 27 de agosto de 1975 la presidenta María Estela Martínez de Perón lo designó comandante en jefe del Ejército.
El 24 de marzo de 1976 encabezó, junto con Emilio Eduardo Massera y Orlando Ramón Agosti, el golpe de Estado que derrocó a la presidenta María Estela Martínez de Perón, también conocida como Isabel Perón. Disgregó a los partidos políticos y cerró las sesiones del Congreso Nacional, dando comienzo al llamado Proceso de Reorganización Nacional.