MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Una monja salvadoreña fue internada en un hospital de la ciudad italiana de Rieti luego de quejarse de fuertes dolores abdominales. Sin embargo, lo que la religiosa experimentaba en realidad eran dolores de parto y dio a luz a un varón de 3.5 kilos de peso. La monja de 31 años aseguró que no sabía del embarazo y sus compañeras se sorprendieron al enterarse que los dolores abdominales se debían al trabajo de parto. La salvadoreña fue auxiliada el martes pasado por los médicos del convento de Campomoro. En ese lugar Las Pequeñas Discípulas de Jesús administran un asilo de ancianos. De acuerdo con la agencia Notimex, los medios locales indicaron que las monjas llamaron a una ambulancia, alarmadas por el malestar de su compañera. No obstante, cuando los médicos revisaron a la paciente le informaron que estaba por dar a luz, aunque ella decía que “no era posible”, ya que es “una religiosa”. Una ecografía realizada en el hospital confirmó que la “masa” que la religiosa decía sentir en el abdomen era un bebé que finalmente nació la madrugada del miércoles 15. La dirección del hospital de Rieti indicó que la monja y el bebé, que fue llamado Franceso (en honor al Papa), estaban en buen estado de salud. La madre superiora dijo que en el convento nadie se enteró de nada y que la monja "no supo resistir a las tentaciones", mientras que el obispo de Rieti, Delio Lucarelli, se dijo sorprendido y manifestó que será mejor que la religiosa deje los hábitos pues no cumplió con el voto de castidad.