Trump: una "gran muralla" frenaría el flujo de drogas e inmigrantes
WASHINGTON (apro).- Donald Trump, el magnate de la industria de la construcción y multimillonario aspirante a la nominación presidencial del Partido Republicano, aseguró que con la construcción de una barda en la frontera con México, él frenaría el flujo de drogas e indocumentados a Estados Unidos.
Durante el último debate entre nueve candidatos a la nominación presidencial republicana, y a mes y medio de que se realice la primera elección primaria, Trump insistió en que para contener las amenazas a la seguridad nacional de Estados Unidos la mejor opción es construir una barda sobre los más de 3 mil kilómetros de la frontera sur de su país.
“No estamos hablando de aislacionismo, estamos hablando de seguridad”, comenzó a decir Trump durante el debate, celebrado en Las Vegas, Nevada, y organizado y conducido por la cadena de televisión CNN.
“Nuestro país está fuera de control, la gente está colándose por nuestra frontera sur. Construiré una barda, será una gran muralla; la gente no cruzará mientras no lo hagan de manera legal, las drogas no pasarán el cerco”, ofreció Trump.
En el debate, además del multimillonario participaron el neurocirujano Ben Carson; el senador por Texas, Ted Cruz; Marco Rubio, senador por Florida; Jeb Bush, exgobernador de Floridad; la empresaria Carly Fiorina; Chris Christie, gobernador de Nueva Jersey; John Kasich, gobernador por Ohio, y Rand Paul, senador por el estado de Kentucky.
A raíz de la masacre de 14 personas en San Bernardino, California, por parte de un matrimonio musulmán, a quienes el FBI ha declarado seguidores del grupo terrorista Estado Islámico (EI), el debate se centró casi en su totalidad en la discusión de la guerra al terrorismo internacional y sobre quién de los candidatos ofrece la mejor propuesta de seguridad nacional.
Trump, quien asegura que para mantener a Estados Unidos libre de ataques terroristas, tanto domésticos como extranjeros, prohibiría la entrada de musulmanes al país y construiría una barda en la frontera con México, fue objeto de críticas de sus ocho contendientes, debido a que consideran sus propuestas como una violación constitucional y un tema de extremo aislamiento frente a la comunidad internacional.
“Lo que debemos hacer es destruir al EI en el califato (Siria), ese debería ser nuestro objetivo… Donald, sabes, es grandioso, pero es un caos como candidato y sería un caos como presidente, no será comandante en jefe de las fuerzas armadas para mantener seguro a nuestro país”, afirmó Bush, inmediatamente después de que Trump hablara de construir la barda en la frontera con México.
En respuesta a las críticas del hijo y hermano de los expresidentes George H. W. y George W. Bush, el multimillonario que ha calificado a los mexicanos de “narcotraficantes, criminales y violadores” aseguró que el exgobernador de Florida lo descalifica porque su campaña presidencial ha fracasado.
Su campaña “ha sido un desastre total, a nadie le importa, y francamente soy la persona más solida aquí, forjé una compañía tremenda y quiero hacer esto para que Estados Unidos sea grandioso nuevamente”, subrayó Trump.
Un común denominador en el debate entre los nueve aspirantes a la nominación presidencial republicana fue el descalificar la política del presidente Barack Obama para destruir al EI en Siria, y en términos generales su lucha contra el terrorismo.
Hillary Clinton, la candidata a la nominación presidencial por el Partido Demócrata y casi segura ganadora de ésta, fue al igual que Obama víctima de las críticas de los nueve aspirantes republicanos.
“Ella ha dicho que aplicaría casi la misma política que la del presidente Obama para el caso de Siria y la guerra al EI”, dijo el gobernador Christie, anotando que si la de Obama ha sido un fiasco, peor sería una presidencia con Hillary Clinton.
Los nueve republicanos, aunque con diferente matiz, descalificaron la diplomacia como bandera de lucha contra el terrorismo y para lograr la estabilidad en el Oriente Medio, especialmente en Siria que vive una guerra civil.
Con diferentes metáforas los nueve republicanos, encabezados por Trump, Cruz, Rubio, Bush y Christie, dieron a entender que de ganar la presidencia en las elecciones de noviembre de 2016 lanzarían guerras preventivas para contener el terrorismo, y enviarían más tropas a combatir directamente al EI en la región del Oriente Medio.
Al hablar del ataque de terrorismo doméstico, como ha etiquetado el FBI la masacre de San Bernardino, Trump y Cruz dijeron que optarían por prohibir la entrada de musulmanes extranjeros a Estados Unidos, aunque el senador por Texas acotó que lo haría por un plazo de sólo tres años.
Lo que ninguno de ellos mencionó fue promover una ley para restringir o controlar la venta de armas semiautomáticas en Estados Unidos, pues con la actual flexibilidad de las leyes fue posible que la pareja musulmana consiguiera los rifles AR-15 con los que asesinaron a las 14 personas e hirieran a 21 más en San Bernardino.