Propone Turquía a países ricos atender a sus enfermos en naciones pobres
MÉXICO, D.F. (apro).- En el marco de las negociaciones secretas que llevan a cabo los representantes de 50 países en Ginebra para llegar a un Acuerdo sobre el Comercio de Servicios (Tisa, por sus siglas en inglés), el gobierno turco emitió una propuesta para que los países más ricos se ahorren costos en materia de salud al enviar sus enfermos a operarse en los países pobres.
Según un documento clasificado que la Associated Whistleblowing Press (AWP) proporcionó a Apro, si bien la delegación turca reconoció que la salud “no es una mercancía o servicio típico”, aseveró que “existe un enorme potencial sin explotar para la globalización de los servicios de asistencia médica”, y propuso que el Tisa contemple el reembolso de los costos de las operaciones médicas en el extranjero en las pólizas de seguros.
El documento retomó esta idea de un estudio publicado en 2006 en la revista estadunidense Asuntos de Salud, el cual sostuvo que el gobierno de Barack Obama podría ahorrar miles de millones de dólares al enviar sus enfermos a operarse de la rodilla en Hungría o en India –por un costo menor en 8 mil dólares al de Estados Unidos, boleto de avión incluido–, por ejemplo.
Es más: el estudio incluso sugirió que las compañías de seguro privado rebajen los precios de sus prestaciones para los clientes que aceptarían de salir del país para “una gama específica de tratamientos”.
Literalmente, el estudio promocionó “tratamientos del primer mundo con precios del tercer mundo”, sobre todo porque los países pobres cuentan con ciertos hospitales aceptables “para un paciente de un país industrializado”, ya que “los mejores hospitales en países en desarrollo” –muchas veces privados–, compiten en calidad con los de los países ricos.
Ante esta solución en apariencia milagrosa, el estudio planteó sin embargo algunos puntos negativos, como por ejemplo la elevación de los costos para los sistemas públicos de salud, así como para “los pacientes quienes no podrán viajar”.
También señaló que “existe un peligro real” de que la demanda de atención médica por parte de personas originarias de países ricos aumente los precios de salud para la población local y “acentúe las desigualdades”, ya fuertes, en el acceso a la salud en los países pobres.
Aun así, la delegación turca consideró que, en materia de salud, existen “ventajas comparativas” entre países, habló de “competidores extranjeros” y afirmó que el sector debería orientarse “hacia el mercado”.
Es de señalar que, si bien las negociaciones del Tisa se están llevando afuera del marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC) –lo cual garantiza su opacidad--, consorcios empresariales se formaron en distintos países, incluso México, para influir en el balance de las negociaciones.
Entre éstas figuran la Asociación Estadunidense del Seguro, o las compañías de seguro AIG, Prudential, Liberty Mutual o Metlife.
“Hasta el momento el sector de los servicios de salud ha desempeñado un papel muy secundario en el comercio internacional de servicios”, lamentó el documento presentado en las negociaciones del Tisa, luego de aseverar que el negocio de la salud “puede crear oportunidades y tener una serie de beneficios no sólo para los socios comerciales que participan en las actividades comerciales, sino también para el conjunto de la población”.