CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La adolescente brasileña que fue violada por unos 30 hombres en Río de Janeiro, la semana pasada, denunció que no ha podido salir de su casa por las amenazas de muerte que ha recibido. “Estoy aterrorizada. Me siento como si viviese en una cárcel privada, no puedo ni salir de casa”, dijo anoche en una entrevista que dio a la televisora Globo. Añadió: “No puedo salir de mi casa para nada, en mi Facebook hay 900 mil mensajes de gente que dice que si entro en una favela me van a matar”. La chica de 17 años, quien junto con su familia tuvo que acogerse al Programa de Protección a Niños y Adolescentes Amenazados de Muerte, también criticó la actitud del comisario que lideró las investigaciones en la División de Represión a los Crímenes Informáticos (DRCI), Alessandro Thiers. “El propio comisario me culpó, no me sentí cómoda en ningún momento en el interrogatorio, creo que es por eso que las mujeres no hacen denuncias” de estupros, comentó. “Fue horrible lo que pasó en la delegación, me preguntaron por qué yo estaba en aquel lugar, me culparon de cosas que yo no hice, me preguntaron si yo había tenido sexo grupal”. Fernando Veloso, jefe de la Policía de Investigaciones de Río de Janeiro, declaró que investigará la conducta de su subalterno Thiers, quien será separado del caso provisoriamente, y adelantó que se organizará una operación policial en las favelas en las que se ocultan los agresores identificados en el video de la violación subido a las redes sociales. Pero el exnovio de la menor y quien presuntamente organizó la agresión, Lucas Perdomo, así como el autor del video, Raí de Souza, ya fueron detenidos. El primero, capturado en un restaurante en el centro de Río de Janeiro, aseguró que tras pasar la noche con la adolescente no volvió a verla. El otro acusado preso, Raí de Souza, de 22 años, se entregó voluntariamente este lunes en la comisaría. Anteriormente se había presentado ante la Policía para identificarse como el autor del video difundido por internet. Souza dijo entonces haber tenido relaciones sexuales “consentidas” con la víctima, pero negó su participación en la supuesta violación colectiva. Pese a tal declaración, su abogado dijo hoy que su cliente alega que no fue el autor del video y que las imágenes fueron grabadas con su móvil por un narcotraficante al que sólo identificó como Jefferson. De Souza agregó que la denunciante inventó lo de la violación, y argumentó que en la vivienda en que estaban difícilmente caben tantas personas. La violación colectiva que sufrió la joven comenzó a ser investigada desde el pasado miércoles 25, cuando numerosas personas denunciaron la circulación del video en las redes sociales, en el que la adolescente aparecía desnuda y desmayada, con sus órganos genitales sangrando, mientras el autor de la grabación comentaba que había sido violada por al menos 30 personas. Según las autoridades, además de la violencia sexual, en Brasil hay una “cultura” policial que tiende a culpar a la víctima debido a los prejuicios “machistas” de la corporación. De acuerdo con el Instituto de Seguridad Pública, en Río de Janeiro y otras ciudades del estado se registran 13 estupros por día. La representante de ONU Mujeres en Brasil repudió dos casos de violación colectiva de adolescentes registrados en las últimas semanas. “Además de tratarse de mujeres jóvenes, estos casos bárbaros se asemejan por el hecho de que las dos adolescentes fueron atraídas por sus victimarios en tramas premeditadas y fueron violentamente atacadas en un contexto de uso de drogas ilícitas”, afirmó Nadine Gasman. Y la ONU alertó sobre la “revictimización” que pueden sufrir las mujeres en estos casos, mediante “la exposición social de la víctima y de los delitos, incluyendo imágenes y videos en redes sociales (...), en acciones que violan el respeto y la dignidad de las víctimas, como la falta de privacidad, la culpabilización y los juicios morales basados en prejuicios y discriminaciones sexistas”.