CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un policía disparó esta tarde a un individuo que trató de agredirlo con martillo en mano y al grito de “¡Esto es por Siria!”, en la plaza de la catedral de Notre Dame de París, informaron medios locales. Según los reportes, un policía disparó contra el agresor para defender a su compañero, la tarde de este martes en el atrio de la célebre catedral, que se ubica en el centro de la capital francesa, al lado de la sede de la Prefectura central de la policía de París. Aunque todavía hay muchos elementos por confirmar, todo apunta a que se trató de un acto terrorista. El ministro del Interior, Gérard Collomb, dijo que el agresor, un hombre que según la documentación que portaba —y cuya autenticidad se está verificando— sería un estudiante argelino. Justo en el momento de cometer el ataque gritó: "¡Esto es por Siria!” y según la agencia France Presse, que cita a una fuente de la investigación, el hombre aseguró ser "un soldado del califato" del Estado Islámico (ISIS). El atacante, que según algunos medios locales tiene unos 40 años, resultó herido y fue llevado a un hospital para su atención, sin que se revelara su pronóstico. El policía agredido también resultó herido, pero sus lesiones son leves, de acuerdo con la información oficial. Además, del martillo, el agresor portaba cuchillos de cocina, reveló Collomb. “Hemos pasado de un terrorismo muy sofisticado a uno en el que se utiliza lo que sea para cometer una agresión”, agregó en referencia no solo a este ataque, sino al más reciente atentado de Londres, donde terroristas arrollaron a transeúntes con una camioneta y luego atacaron con cuchillos. El ministro adelantó que este incidente será tratado en el Consejo de Defensa que el gobierno de Emmanuel Macron celebra cada miércoles. En la cita, se estudiarán eventualmente nuevas medidas para combatir el terrorismo, “la principal prioridad del presidente”, subrayó el ministro. En torno a las 17:15 horas locales, las autoridades todavía no disponían de muchos datos ni habían confirmado la muerte del agresor ni sus motivaciones.