CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió que de no tomar medidas urgentes para frenar y reparar los graves daños al medio ambiente en 2050 podrían producirse millones de muertes prematuras en ciudades y regiones de Asía, Medio Oriente y África.
Durante la presentación de la sexta edición del reporte Perspectivas del Medio Ambiente Mundial, GEO-6 por sus siglas en inglés, la organización advirtió que la resistencia antimicrobiana se convertirá en una de las principales causas de muerte a mediados de siglo, debido a la contaminación de los cuerpos de agua dulce.
Destacó que para entonces los interruptores endocrinos afectarán la fertilidad masculina y femenina, así como el desarrollo neurológico infantil.
Elaborado por un equipo de 250 científicos y expertos de más de 70 países, que trabajaron durante los últimos cinco años, el informe indica que pese al poco apoyo que existe por parte de los lideres públicos, empresariales y políticos que se aferran a modelos obsoletos de producción y desarrollo, el mundo tiene a su disposición herramientas como la ciencia, la tecnología y las finanzas para transitar al desarrollo sostenible.
Joyce Msuya, directora ejecutiva Interina de ONU Medio Ambiente señaló que, ante el informe, que construye una perspectiva de la humanidad, nos encontramos en una encrucijada.
“¿Continuamos por nuestra ruta actual, que nos llevará a un futuro sombrío, o escogemos el camino del desarrollo sostenible? Esa es la elección que deben hacer nuestros líderes políticos, ahora", afirmó.
De acuerdo con el GEO-6, si los países destinan a las inversiones verdes el equivalente al 2% del PIB, producirían un crecimiento a largo plazo tan alto como el que se proyecta actualmente, pero con menor impacto en el cambio climático, la escasez de agua y la pérdida de ecosistemas.
Alimentación, también en riesgo
Además, aconsejó adoptar dietas menos intensivas en carne y reducir el desperdicio de comida, pues de no tomar acciones, será necesario aumentar la producción de alimentos en 50% para satisfacer la demanda de entre nueve mil y 10 mil millones de habitantes del planeta en 2050.
Según la publicación, 33% de los alimentos del mundo se desperdicia y 56% de esos residuos se genera en los países industrializados.
Entre las recomendaciones que desglosa el informe destacan: adoptar mejores prácticas de gobernanza, planificación de uso de la tierra e infraestructura verde, inversión estratégica en áreas rurales, lo que reduciría las presiones de la migración, así como frenar el flujo de ocho millones de toneladas de residuos plásticos que llegan a los océanos cada año, problema para el que todavía no existe un acuerdo global.
Los autores afirmaron que las políticas que abordan sistemas completos, como la energía, los alimentos y los residuos, pueden ser mucho más efectivas que las de problemas específicos, como la contaminación del agua.
Joyeeta Gupta y Paul Ekins, copresidentes del proceso GEO-6, explicaron que ya existen políticas y tecnologías para evitar estos riesgos, pero lo que falta es voluntad para implementarlas a una velocidad y una escala suficientes.
Finalmente, el organismo expresó que actualmente el mundo no está ni cerca de cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030 o 2050, por lo que se requieren medidas urgentes, ya que cualquier retraso en la acción climática aumentará el costo de alcanzar los objetivos del Acuerdo de París o revertirá el progreso logrado hasta ahora.
El informe fue publicado en Nairobi, Kenia, con motivo de la cuarta Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, máximo foro global de toma de decisiones ambientales, donde se espera que las negociaciones aborden temas críticos como el desperdicio de alimentos, la movilidad eléctrica y la crisis de contaminación por plásticos en los océanos.