BOGOTÁ (Apro).- Una facción de las desmovilizadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) encabezada por el antiguo número dos de esa exguerrilla, Iván Márquez, anunció hoy que retomó las armas ante lo que considera una “traición” del Estado a los acuerdos de paz. En un video de 32 minutos divulgado por internet y las redes sociales, Márquez, quien aparece en uniforme de combate y acompañado de exjefes guerrilleros como Jesús Santrich, “El Paisa” y “Romaña”, dijo que el nuevo grupo nace “bajo el amparo del derecho universal de levantarse en armas contra la opresión”.

Lo que sigue, agregó, “es la continuación de la lucha guerrillera en respuesta a la traición del Estado a los acuerdos de paz de La Habana”.

Márquez y los exjefes guerrilleros que lo flanqueaban ya habían abandonado el proceso de paz y se desconocía su paradero, aunque informes de los servicios de seguridad de Colombia indican que estarían refugiados en la vecina Venezuela. El año pasado, Márquez desapareció luego de que Santrich fuera capturado por la Fiscalía de Colombia con fines de extradición a Estados Unidos por cargos de narcotráfico, aunque el exjefe guerrillero fue liberado en mayo pasado por su condición de congresista del partido FARC. Luego huyó. Márquez, quien aparece en el video rodeado de hombres armados y con un cartel con las siglas de las FARC, señaló que el nuevo grupo insurgente sólo responderá a acciones ofensivas de las Fuerzas Militares y que no atacará cuarteles “que no dirijan sus miras y cañones contra los intereses populares”. “Timochenko”, en desacuerdo El excomandante en jefe de la antigua guerrilla de la FARC y actual jefe del partido surgido de ese grupo tras su desarme, Rodrigo Londoño, “Timochenko”, deploró la decisión de Márquez y el resto de disidentes y dijo que en este momento hay que cerrar filas por la paz y por el cumplimiento de los acuerdos negociados durante cuatro años en La Habana. Dijo que, en la medida en que se cumplan los acuerdos, se cerrará el paso a “discursos incendiarios” como el de Márquez. De acuerdo con “Timochenko”, el nuevo grupo insurgente es muy pequeño ya que entre el 95 por ciento y 97 por ciento de los 13 mil exguerrilleros de las FARC que entregaron las armas se mantienen fieles al proceso de paz. El surgimiento de la nueva guerrilla se produce un año después de que llegó a la Presidencia el “delfín” político del exmandatario Álvaro Uribe, Iván Duque, quien ha enfrentado enormes presiones del sector más ultraderechista de su partido, el Centro Democrático, para hacer “trizas” los acuerdos de paz. El exjefe del equipo del gobierno colombiano que negoció la paz con las FARC, Humberto de la Calle, rechazó el surgimiento de la nueva guerrilla y pidió al presidente Duque asumir el liderazgo en defensa de la paz y dejar de actuar “con criterio partidista, como lo ha hecho hasta la fecha”. Además, llamó al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a redoblar su vigilancia del proceso de implementación de los acuerdos de paz, la cual ha sido lenta y ha sido permanentemente obstaculizada por el expresidente Uribe y el gobernante Centro Democrático.

“La paz es un logro histórico que no tiene marcha atrás”, aseguró De la Calle.

Márquez sugirió que el nuevo grupo insurgente hará una alianza con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), la única organización insurgente que queda en Colombia tras el desarme de las FARC. También dijo que la nueva guerrilla no hará “retenciones”, pero sí cobrará “impuestos” a organizaciones que participen en economías ilegales y a trasnacionales que “saqueen las riquezas del país”.