CIUDAD DE MÉXICO (apro). - Por primera vez, el expresidente de Brasil Michel Temer se refirió a la destitución de su antecesora Dilma Rousseff como un “golpe de Estado”. De acuerdo con la agencia AFP, durante un programa transmitido por el canal TV Cultura de Brasil, Temer dijo que “nunca ha apoyado ni hecho un compromiso con el golpe de Estado” en referencia al juicio político por el que cesaron de su cargo a Rousseff. Temer, incluso, declaró que trató de impedir el cese de la política brasileña. En 2016, Rousseff fue acusada de manipular el presupuesto, una práctica violatoria de la Constitución, por lo que fue llevada a un juicio político que devino en su destitución. Desde entonces, Rousseff y varios de sus simpatizantes han afirmado que se trató de una maniobra de sus adversarios políticos para hacerse del poder, luego de que el Partido de los Trabajadores gobernara el país desde el ascenso de Luiz Inácio Lula da Silva en 2003. Michel Temer fue el sucesor de Rousseff y estuvo en la presidencia brasileña del 31 de agosto de 2016 al 31 de diciembre de 2018. Su sucesor fue el político de extrema derecha Jair Bolsonaro.