Las fotos salen del clóset
Las fotos ocultas
Los que vivieron para contarlo
El número 1310 de Proceso publica un excelente artículo de Sanjuana Martínez y 24 de las 35 fotos que se le proporcionaron en forma anónima Son imágenes del 2 de octubre de 1968 en la noche, y los jóvenes detenidos son participantes del Movimiento Estudiantil Se les ha vejado y golpeado, se les ha dado trato de criminales, se les amenaza con armas, se les tiene en el suelo Gracias a los numerosos testimonios, orales y escritos desde 1968, y a la elocuencia irrefutable de las fotos, se puede reconstruir el "sonido" de la escena, los gritos encanallecidos, la "Chingada" que va y viene como la palabra que es un "altar de los sacrificios", las amenazas de muerte, la vocación torturadora que algo o mucho se frustra por la notoria dignidad de los detenidos
Dos hechos se destacan especialmente: la prepotencia de los agentes del guante blanco, del Batallón Olimpia, de existencia negada demasiado tiempo y sólo aceptada a regañadientes, y la figura de Florencio López Osuna, estudiante del IPN, el primer orador del mitin, golpeado brutalmente, vuelto huellas de tortura y girones de ropa, y de mirada ajena a temores o súplicas, concentrada extraordinariamente en el dolor físico De publicarse el 3 o el 4 de octubre de 1968, estas fotos habrían ridiculizado al instante las explicaciones oficiales y el discurso de perpetua blancura del secretario de Gobernación Luis Echeverría No son, desde luego, los primeros testimonios gráficos de la Noche de Tlatelolco El número especial de Por Esto!, publicado todavía en octubre de 1968, contiene fotos indudablemente más dramáticas, de niños en la morgue y cuerpos arracimados, pero Por Esto! circulaba poco y en el clima de amedrentamiento que se desprende de los cadáveres, la imposibilidad de la protesta Las fotos donde culmina la jornada que arrasó con los restos del Estado de derecho no dejan sitio a las disculpas forzadísimas del régimen y su partido No sólo se dio la provocación de los militares o paramilitares, también se quiso erradicar a golpes y encierros el espíritu del Movimiento
Al contemplar por vez primera las fotos de hace 33 años, se comprenden las funciones orgánicas de la indignación moral
Las fotos ocultas
Los que vivieron para contarlo