Jesús Ortega y la sombra de Aguilar Talamantes

miércoles, 16 de enero de 2002 · 01:00
México, DF - En la década de los setenta, las invitaciones para que formara parte de grupos guerrilleros eran frecuentes Venían de manera indirecta a través de documentos que le entregaban amigos, y luego, ya directamente, con invitaciones a reuniones clandestinas de la Liga Comunista 23 de Septiembre, el Movimiento Armado Revolucionario -?entrenado en Corea-? y el Grupo Lacandones Pero Jesús Ortega ya había optado por otro camino "Yo tenía la convicción de que el foquismo guerrillero, el movimiento armado, no era la salida, sino la formación de un partido de izquierda, amplio, de masas, vinculado a sectores de la población y que fuera influyente de la vida nacional No un movimiento aislado de la población, incitador de la violencia", precisa el aspirante a dirigir el partido de izquierda más amplio que tiene el país y que está en crisis En 1976, mientras estudiaba en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Politécnico la carrera de químico bacteriólogo y parasitólogo --de la cual no se ha titulado--, Ortega asistió a una reunión que lo marcó para el futuro, la del Partido Socialista de los Trabajadores (PST), dirigido por Rafael Aguilar Talamantes "El PST me impactó, había dirigentes muy jóvenes que habían participado en el 68, que habían sido presos políticos y dirigentes del Partido Comunista Mexicano, como el propio Aguilar Talamantes, Pedro Etienne y Graco Ramírez A la reunión a la que fui me impresionaron mucho los dirigentes campesinos que estaban preparándose para tomar tierras con mucha determinación Yo dije: este es un buen espacio para darle cauce a la idea de que se necesitaba un partido político" Era la época de la toma de tierras en el campo y en las ciudades, lo mismo que de la clandestinidad de los grupos armados en todo el país En el Politécnico, Jesús Ortega había participado en los comités de lucha derivados de los movimientos del 68 y 71 Eran sus primeras actividades políticas, aunque de manera incipiente había participado en algunas acciones reivindicatorias estudiantiles del Tecnológico de Aguascalientes, donde nació en 1952, y también en el Frente Popular Independiente (FPI) "Muchos jóvenes estábamos influidos de la crítica que en 68 se había hecho al Partido Comunista Mexicano y estaban buscando alternativas, y el PST se presentó como una opción muy buena, muy significativa, con líderes del 68 y dirigentes campesinos y sociales Esto fue en 1976", explica Ortega Al principio trabajó en una organización juvenil del PST, luego en una agrupación de colonos en la Ciudad de México, encabezando movilizaciones de toma e invasión de tierras en las delegaciones Iztapalapa, Alvaro Obregón, Gustavo A Madero, Magdalena Contreras y Coyoacán Con esa experiencia fue nombrado en 1978 dirigente del PST en el Estado de México, y encabezó el movimiento que tomó unas tierras en el municipio de Huixquilucan, mismo que provocó enfrentamientos con policías y marchas a Los Pinos, donde fueron reprimidos Ortega, entonces, era firme creyente de la tesis que permeaba en el PST: unir las fuerzas de izquierda con las corrientes "nacionalistas y revolucionarias" del PRI, y juntos impulsar la formación de un solo partido que transformara el país Con esa idea viaja por el PST a varios estados, "tratando de organizar al partido como un gran movimiento de masas, hasta que se empezó a dar una contradicción entre los métodos de dirección de Aguilar Talamantes, quien confundió la necesidad de un partido político con una estructura vinculada al presidente Luis Echeverría, pero sobre todo con José López Portillo" A pesar de estas diferencias, es hasta 1985 cuando empiezan a darse los primeros síntomas de rompimiento, que se concreta en 1987, año en que de manera coincidente comienza a gestarse el Partido Mexicano Socialista (PMS) y también el proceso de escisión en el PRI por parte de la Corriente Crítica encabezada por Cárdenas "Le planteamos a Talamantes que se estaba dando el cumplimiento de la tesis de la unidad de la izquierda socialista con este sector nacionalista revolucionario del PRI, y que habría que conjuntarlo en un gran movimiento antioligárquico y antiimperialista Talamantes no lo entendió así, porque ya estaba muy vinculado a las decisiones del presidente de la República y al aparato del poder", sostiene Ortega Al romper con Aguilar Talamantes, trataron de pelearle el registro del PST durante la Tercera Asamblea Nacional, "pero el gobierno se lo dio y la mitad se separó; iniciamos pláticas con Gilberto Rincón Gallardo, Heberto Castillo y Pablo Gómez, para ser parte del PMS Nos aceptaron en una actitud unitaria y fuimos la sexta expresión que formalmente participó en el proceso de formación del PMS: estaba el PCUM, el PMT, EMRP, Partido Patriótico Revolucionario, la Unidad de Izquierda Comunista y la parte del PST" La presencia de Aguilar Talamantes en la carrera de Ortega lo ha señalado negativamente en algunos momentos desde entonces Incluso, ahora que empieza la competencia para la directiva del PRD, nuevamente ha resurgido esta crítica "Puede ser que me haya afectado, pero sería algo muy mezquino, porque como militante en el PST actué de manera muy genuina, auténtica, y no justifico nada, fui abierto", ataja Y esgrime: "Además habría que recordar que Talamantes fue dirigente de las juventudes comunistas, fue el líder principal de la Confederación de Estudiantes Democráticos, así que si se utiliza ese recurso en mi contra, entonces tendría que hacerse contra otros, como Raúl Alvarez Garín, que también fue dirigente de las juventudes comunistas bajo la dirección de Aguilar Talamantes, lo mismo que Pablo Gómez y otros que fueron militantes de la confederación estudiantil, y que incluso defendieron a Aguilar Talamantes cuando estuvo en la cárcel de Michoacán Ellos serían cómplices" Pero Ortega insiste: "Hay que recordar que nosotros rompimos con él cuando nos dimos cuenta que estaba en una actitud oportunista y al servicio de intereses que no eran del partido, y partimos a la mitad al PST, para formar el Partido Mexicano Socialista Eso fue importante" Al crearse el PMS, se formó una dirección plural, reconociendo a las seis fuerzas, y Jesús Ortega pasó a formar parte de esta directiva Heberto Castillo fue lanzado como su candidato presidencial, pero declinó ante Cárdenas, que era el candidato del PARM, "porque nos iba abrumando" Reclama Ortega: "Algunos compañeros que eran ultra radicales en ese momento, y que decían que Cárdenas era un oportunista, se opusieron; hoy los mismos son cuauhtemistas Yo participé en la campaña del 88 en actividades electorales y de propaganda, no como parte de los dirigentes" Al terminar la campaña, luego del fraude del 2 de julio del 88 y de las movilizaciones que trataron de impedir el arribo de Carlos Salinas de Gortari, vino el proceso de disolución del PMS, pero al mismo tiempo la Corriente Crítica, transformada en el Frente Democrático Nacional (FDN), plantea un nuevo partido: el PRD En este proceso Ortega forma parte de la comisión creadora La primera actividad de Jesús Ortega fue electoral Arnoldo Martínez Verdugo fue el primer representante del PRD ante el Instituto Federal Electoral (IFE) y Ortega el suplente Poco tiempo después pasó a ser el titular El estigma de la traición Actual aspirante a dirigir el PRD, Ortega rememora: ya con Cuauhtémoc Cárdenas como presidente del PRD, pasa a la secretaría de Asuntos Electorales y, en el siguiente proceso de elección interna, apoya a Porfirio Muñoz Ledo, con la coalición Arcoiris, quien gana Siendo diputado federal, pasa a ser coordinador del grupo parlamentario, y en esa Legislatura participa en la reforma electoral del 96, la cual ciudadaniza de manera completa el Instituto Federal Electoral (IFE) En ese mismo año Ortega participa por primera vez por la dirigencia nacional del PRD, junto con Andrés Manuel López Obrador, Amalia García y Heberto Castillo, pero declina en favor del tabasqueño, quien al final resulta vencedor Con López Obrador a la cabeza del PRD, Ortega es el secretario general, y es el periodo en que el perredismo tiene el mayor crecimiento electoral: gana las elecciones del 97 en el Distrito Federal, Nayarit, Zacatecas y Tlaxcala Hacia el 99, por segunda ocasión busca la dirigencia nacional de su partido, en un proceso lleno de irregularidades que los afectó seriamente para las elecciones del 2000, pues los presentó ante la ciudadanía no sólo como un partido conflictivo internamente, sino con prácticas que sólo se le atribuían al PRI, como "carrusel", "operación tamal" y doble votación Justifica: "Cuando viene la sucesión de Andrés Manuel, participo como candidato contra Amalia García; hacemos una campaña desaseada por culpa de la dirección nacional del partido; hubo irregularidades, pero nosotros no participamos, estuvimos solos, prácticamente contra todos: contra Cárdenas, contra Amalia y otros compañeros Al final no se contaron los votos y, ante el escándalo, declinamos antes que el PRD continuara en el terrible tobogán de la descomposición Como una salida inventamos la encuesta, sabiendo cuál sería el resultado: Amalia sale ganadora y declino en su favor" Sin embargo, el ahora senador por Aguascalientes obtiene una gran ganancia de la derrota: la formación de la corriente Nueva Generación, la única en el PRD que tiene estructura a nivel nacional Aunque reconoce: "Empezó desde que fui secretario general, ese es el origen de la corriente y de su estructura nacional" Lastimados por el proceso interno que fue impugnado e invalidado, Ortega no oculta la molestia que hubo entre los perredistas en los primeros meses de la presidencia de Amalia "Fueron difíciles, de rencores, porque considerábamos que el proceso había sido terriblemente injusto El ingeniero Cárdenas apoyó a Amalia de manera clara y lo consideramos injusto" Acusa que inclusive a veces se alentaba la confrontación de "chuchos" y "amalios", las dos corrientes que ahora mantienen en sus manos al PRD "Caímos en la trampa, hasta que nos dimos cuenta que teníamos coincidencias sobre el rumbo que debería tener, de mediano y largo plazos, el PRD; en su transformación profunda, porque ya había agotado una etapa Las coincidencias de ambas corrientes van en el sentido de que durante doce años el PRD ya hizo un gran esfuerzo en todo el proceso como partido de confrontación a los regímenes priistas de Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, tiempo en el que hubo más de 500 muertos Pero consideran que esta etapa ya está agotada y necesitan entrar a una nueva "Entonces formamos la corriente de Nueva Izquierda, en una reunión que tuvimos en 1999 en Tlaxcala, en donde dijimos: hay que impulsar esta nueva idea de un partido de izquierda moderno, propositivo, que se oponga a lo que daña el país, pero que sea alternativa; un partido con vocación de gobierno, no un partido de la eterna oposición, no un partido contestatario o testimonial, sino un verdadero partido político, y no un frente, un conglomerado de diversas fuerzas" Junto con Jesús Zambrano, actual secretario general del PRD, Ortega y Amalia García vienen impulsando la idea de que la figura de Cuauhtémoc Cárdenas, como eje aglutinador y fiel de la balanza entre las corrientes del perredismo, debe dar paso a la institucionalidad, propuesta que dividió al PRD durante el Sexto Congreso Nacional, celebrado en Zacatecas en abril del 2001 "Nueva Izquierda nace con ese propósito, darle al PRD una condición de verdadero partido político, de elaborar un nuevo programa y participar en la construcción de una nueva etapa" Ortega es defensor de las corrientes dentro del PRD, a las cuales se opone Rosario Robles, calificándolas de ser espacios corporativos similares a los del PRI, pues a través de ellas se han tenido puestos en el partido y espacios legislativos "Eso es falso y absurdo, porque el PRD tiene su origen en un movimiento cívico muy amplio en el que participan varias organizaciones de izquierda Las corrientes siempre han existido en el PRD y el asunto es que había un factor de decisión en la resolución de los conflictos: Cuauhtémoc Cárdenas Pero conforme avanza el desarrollo del partido, el factor del ingeniero Cárdenas ya no va siendo tan determinante, tan decisivo, y se ponen en juego diferencias, circunstancias y posiciones políticas sobre asuntos diferentes "Entonces lo que siempre había existido, que son las corrientes, aparece como nuevo y además como conflictivo El problema es que el factor de decisión, Cárdenas, tiene cada vez menos pesos por el propio desarrollo del partido, hasta que llegamos a la actual situación "Nosotros decimos que ya se acabaron lo partidos de las unanimidades y uniformidades; se acabaron los partidos de la línea única dictada por un individuo o un solo personaje; esos son partidos autoritarios, y si el PRD quiere ser democrático, tiene que ser un partido donde fluyan las ideas, la discusión, las razones, y eso implica la formación de corrientes", sintetiza Jesús Ortega va por tercera vez por la presidencia nacional del PRD en contra de Rosario Robles, a quien se identifica con Cuauhtémoc Cárdenas Se siente seguro de ganar, porque "la tercera es la vencida", y porque confía en la estructura nacional que tiene su corriente Nueva Izquierda Se define: "Soy un hombre de izquierda desde muy joven, y congruente con un pensamiento: poner en juego a la política para la transformación del país No creo en la violencia como elemento de cambio; así lo he creído y he sido consecuente de ello A lo mejor algunos compañeros no comparten ese punto de vista y por eso hacen calificativos superficiales de mi comportamiento" Ortega se pronuncia por la negociación y la búsqueda de consensos, y como lo ha demostrado en el último año, no descarta acuerdos con gobiernos que consideran de derecha, como el de Vicente Fox "Sé que la política implica negociación, pero manteniendo incólumes los principios, por eso no creo en el movimiento político espontáneo que toma por asalto el palacio de invierno; por lo menos no creo que sea adecuado ni propicio para las circunstancias políticas del país Más bien creo en la necesidad de formar un gran partido político, un gran movimiento social que tenga tal fortaleza, que logre acceder al gobierno sobre la base de un partido de izquierda, moderno, propositivo y constructivo, que ayude a la solución de los problemas concretos de la ciudadanía" Sin embargo, en lo que Ortega ve su fortaleza, otros ven su debilidad Una negociación hizo que desde la coordinación en el Senado el PRD votara a favor de la ley de derechos y cultura indígenas, impulsada por PAN y PRI, mientras la presidencia de su partido y la coordinación de diputados lo hizo en contra Por su decisión, Ortega fue considerado como un "traidor", por propios y extraños, entre ellos el EZLN Y este podría ser un elemento en su contra a partir de este mes, en que comienza la competencia por la dirigencia nacional del PRD

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