México, D F- El director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Raúl Muñóz Leos, reconoció el miércoles que la paraestatal enfrenta una crisis porque trabaja "con números rojos", debido a que el rendimiento de la empresa es menor a lo que debe pagar por concepto de impuestos Durante su comparecencia ante la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, el funcionario explicó que el primer semestre del año Pemex sus utilidades ascendieron a 124 mil 500 millones de pesos, pero tuvo que pagar a Hacienda 130 mil 500 millones de pesos, lo que quiere decir que "la carga impositiva representó el 105 por ciento de rendimiento y la pérdida neta ascendió a 6 mil 124 millones de pesos" El titular de Pemex agregó que del 1 de julio del año pasado al 30 de junio de 2002 la paraestatal registró una importante pérdida de recursos que representó el 153 por ciento de su patrimonio, por lo que aprovechó el ejemplo para demandar a los legisladores reformar el régimen fiscal de esta empresa "Todas las ventajas que tiene una empresa sana y, por lo tanto el régimen fiscal es esencial, tampoco debemos soslayar que un régimen fiscal adecuado para Petróleos Mexicanos sería, desde mi punto de vista, parte de una reforma fiscal más amplia", indicó Al término de su comparecencia, y en momentos en que la reforma eléctrica del presidente Vicente Fox que plantea la "apertura" del sector al capital privado, está en la lista de espera de la agenda del legislativo, Muñóz Leos urgió al Legislativo a ayudar a Pemex a revertir las pérdidas en la paraestatal, porque "en unos años (esto) será un problema" Sobre la situación que expuso Muñoz Leos sobre Pemex, el diputado priista Gustavo González se dijo preocupado por la pérdida de reservas en la actual administración, ya que, según sus cifras, al 31 de diciembre tenían 18 mil 767 millones de barriles de crudo, cuando dos años atrás éstos ascendían a 25 mil 424 millones de barriles En su oportunidad, el diputado panista Héctor González aprovechó para aludir al sindicato petrolero y el actual problema de desvío de recursos, al sostener que los recursos de la paraestatal "no son propiedad absoluta de un sindicato ni patrimonio a perpetuidad de unas familias de líderes, como tampoco son referencia histórica e ideológica para ningún partido político" 09/10/02