Cifras maquilladas, las trampas de la SEP
México, DF (apro) - Jesús Martín del Campo, exdirigente magisterial y exdiputado federal, señaló que continúan los problemas fundamentales de la educación pública en México, al tiempo de afirmar que las autoridades "tienen una visión limitada al considerar aún que los recursos del sector son un gasto y no una inversión"
El actual subtesorero administrativo del Gobierno del Distrito Federal señaló que "las autoridades van a contracorriente de las tendencias generales en el mundo, donde, a pesar de los efectos dañinos de la globalización, se abren paso tendencias que consideran necesario fortalecer las sociedades del conocimiento"
Egresado de la Escuela Nacional de Maestros y diputado en la LV y LVII Legislatura federal, donde fue miembro de la Comisión de Educación y Presupuesto, Martín del Campo afirmó que es necesario aumentar la inversión en el sector, que hoy es de cerca de 4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB)
Al respecto, dijo: "A esa cifra, la SEP le suma tramposamente la inversión privada en el sector y, entonces, da números triunfalistas frente a una realidad dramática"
A su juicio, muestra clara de que no hay un aumento en los recursos del sector es que, año con año, los maestros siguen protestando en el país "Pasan los años y ellos siguen así, y no porque les guste hacerlo, sino porque sus salarios son muy bajos", justificó
Además, para el exdirigente de la Sección 10 del SNTE, "no se ha logrado la profesionalización del magisterio"
Explicó: "El arraigo de los maestros en sus lugares de origen es algo obligado, no porque les paguen bien o se den condiciones adecuadas para trabajar, sino porque no hay empleos No han logrado un salario que les permita dedicarse íntegramente a la educación"
A ello, indicó, hay que sumar que persisten los rezagos en el sector, y que no se revisan y renuevan los planes y programas de estudio en las escuelas formadores de maestros, de acuerdo con las transformaciones del país
"Hay aún más de seis millones de analfabetas, debido a que no ha sido eficaz el trabajo para abatir esa cifra Creo que si hoy hubiera una campaña parecida a la que hizo Jaime Torres Bodet (exsecretario de Educación Pública), que es cuando más personas se logró alfabetizar en el país en condiciones aun más difíciles, con presupuestos bajos, el número de analfabetas se reduciría
"Esto demuestra que lo que hace falta es un impulso vigoroso para abatir ese problema, algo vergonzoso en México al inicio de este siglo, el de la modernidad y de la globalización Pero el gobierno sigue diciendo que estamos en el primer mundo, que somos de las primeras economías y que no estamos tan mal? Creo que hay que ser más modestos La meta es abatir el analfabetismo y el rezago educativo", criticó
Consultado, además, sobre el desempeño del secretario de Educación Pública, Reyes Tamez Guerra, el funcionario capitalino dijo que es un hombre conocedor de la educación superior, y expresó: "Eso no es ningún problema Pero, quizá, él no tiene una visión integral de la educación pública en el país para impulsarla decisivamente en todos los niveles En mi opinión, sigue considerando el tema del presupuesto para las universidades publicas desde un punto de vista político
"Por lo menos, así se ve ?agregó El presupuesto sigue dándose según se considera que se portan los rectores o si éstos tienen o no alguna inclinación política Pero ellos siguen presentado sus quejas en la Cámara de Diputados, algo que yo viví cuando fui dos veces diputado y miembro de la Comisión de Educación
"Ellos se quejaban de que no había una política clara y transparente para otorgar los recursos Parece que ese problema continúa ahora Un grupo de rectores volvió a protestar por eso Y es que, con los presupuestos asignados, apenas les alcanza para pagar salarios No pueden, incluso, realizar la retabulación de los académicos Y el gobierno considera que deben operar casi con lo elemental", añadió
Consideró que debe darse un impulso muy fuerte a la educación superior porque, de no hacerlo, estaremos sacrificando a una generación de jóvenes, que estaría condenada a tener empleos precarios, siempre con esa visión limitada de las autoridades