Rechaza Clemente Valdés prescripción de crímenes de 1968(Primera de dos partes)
* Hoy presenta su libro La Prescripción de los delitos de los gobernantes
México, D F 28 de octubre (apro)- Los delitos cometidos durante la matanza de estudiantes en 1968, así como todos los crímenes y desapariciones ocurridas a partir del gobierno de Adolfo López Mateos, no pueden prescribir porque los responsables de esos actos violentos ocultaron evidencias, dejaron que transcurriera el tiempo y utilizaron el poder político para frenar las acciones del Ministerio Público
“La prescripción en favor de los empleados que manejan todas las dependencias encargadas de promover la justicia lleva un mensaje muy claro: lo único que garantiza la impunidad total por los delitos que cometan los empleados públicos, además de impedir la investigación de los hechos y de imponer el secreto en todos sus actos, es prolongar tanto tiempo como se pueda un sistema continuo de ilegalidad”
Tales afirmaciones son parte del libro La Prescripción de los delitos de los gobernantes, escrito por Clemente Valdés Sánchez, que bajo el sello de la editorial Fontamara se pondrá en circulación a partir de este miércoles 29
En entrevista, Valdés Sánchez, quien fuera asesor del rector de la UNAM, Javier Barros Sierra, en 1968, cuenta que el proyecto de escribir el libro surgió a raíz de una conferencia que dictó sobre el movimiento estudiantil de 1968 y las razones legales por la que los delitos cometidos no pueden prescribir
“La idea se reforzó –recuerda– a partir de que tuve contacto con algunos exdirigentes de ese movimiento, entre ellos, Félix Hernández y Raúl Álvarez Garín”, dos personajes que en 1998 –al cumplirse 30 años de la matanza– presentaron una demanda penal ante la Procuraduría General de la República (PGR) para investigar lo sucedido el 2 de octubre y castigar a los responsables
Clemente Valdés dice que en su libro ofrece “un tercer punto de vista” sobre lo ocurrido aquel 2 de octubre de 1968: “Yo no vi ni analicé el movimiento desde la lucha estudiantil ni desde el gobierno, sino desde la rectoría de la UNAM, donde yo era asesor del rector Barros Sierra”
Valdés Sánchez estudió derecho, filosofía y ciencia política; dice que salió del esquema de aprendizaje catequístico del derecho gracias al apoyo de sus maestros, Jorge Barrera Graff y Mario de la Cueva Con éste último hizo su tesis, recuerda, la cual versa sobre el derecho a la revolución
Reflexiona: “creo que uno de los aspectos más importante de mi tesis actual es que las leyes, las constituciones, los gobiernos y las instituciones, no son un fin en sí mismo El único fin son los seres humanos que forman la sociedad Desde este punto de vista, todo –leyes, instituciones y gobiernos, únicamente tienen como razón de ser la seguridad, el bienestar de la población y la protección de las libertades humanas fundamentales”
Valdés, quien es autor de otros libros, entre ellos, El Juicio Político, dice, al referirse a la matanza de estudiantes en 1968, que cuando una sociedad es atacada por sus empleados –“desde el presidente hasta los policías que nos asaltan”– las propias leyes se convierten en un obstáculo, de tal suerte que los únicos que pueden investigar, consignar ejercitando la acción penal y seguir con el proceso, son los mismos que llevan a cabo los actos y que muchas veces, asegura, lo hacen invocando la seguridad del Estado, la Patria y todo tipo de abstracciones
Con base en lo anterior, Clemente Valdés sostiene que esa es la razón fundamental por la cual, en el caso de las muertes del 2 de octubre de 1968, la prescripción no puede aplicarse, pues lo considera “un absurdo”
Refuerza: “Nadie en su sano juicio, puede esperar que aquellos que ordenaron esas atrocidades, esos crímenes contra la población, se acusen a sí mismos, pues son los únicos que pueden ejercitar la acción penal y tienen el control del Ministerio Público, el cual depende constitucionalmente del presidente de la República, y de los gobernadores, a nivel local”
--¿Con base en qué doctrina o principio del derecho, fundamenta usted que los delitos cometidos durante la barbarie del 2 de octubre no pueden prescribir?
--Esto se sustenta en una lógica elemental sobre la razón de ser de los gobiernos y de las instituciones Es una idea que sostengo desde hace 20 años y que he defendido en conferencias y libros
Valdés es autor de varios libros, en efecto, entre los cuales destaca La Constitución como instrumento de dominio, El juicio político, los cuales surgieron, dice, a través de diálogos y conferencias, es decir, de la misma forma en que surgió la idea de escribir La Prescripción de los delitos de los gobernantes