* José Luis González falleció el sábado pasado en un accidente, en Avándaro México, D F, 17 de noviembre (apro)- José Luis González y González, primer coordinador de la precampaña de Vicente Fox a la Presidencia de la República, falleció el sábado en Avándaro, cuando perdió el control de la motocicleta en la que paseaba y se precipitó en un barranco González y González, de 59 años de edad, fue velado el domingo en una funeraria de la avenida Félix Cuevas y su cuerpo será cremado el martes 18 Al velatorio acudieron numerosas amistades y algunos miembros de la clase política en el poder, entre ellos el presidente Fox y el secretario de Gobernación, Santiago Creel La presencia de Fox en el velatorio no fue notificada a los medios por la oficina de prensa de Los Pinos, contra la costumbre en boga este sexenio de divulgar la mayoría de los actos presidenciales, públicos y privados, sean o no relevantes Hasta el lunes por la tarde, igualmente, el presidente no hizo declaración alguna en torno a su excolaborador y amigo durante más de 30 años En sigilo, como si fuera algo vergonzante, Fox se limitó a dejar un mensaje en el libro de visitas de la funeraria: José Luis: Fuimos siempre como hermanos Enseñaste a tus hijos a llamarme tío Mis hijos siempre te quisieron también Te recordaremos siempre y estaremos contigo, al lado de tu familia Que Dios te bendiga! Fox Tu amigo Por su parte, la señora Fox dejó en la funeraria otro mensaje, en su usual estilo ambiguo: Para el siempre buen amigo de Vicente con quien si nos respetamos y quisimos: El amor de Dios lo compartimos todos Dios te tenga en el Cielo Marta de Fox El silencio del presidente –y de la corte-- se explica, quizá, por la distancia que fue tomando González del equipo foxista desde antes de su arribo al poder, a partir de que se confrontó con Marta Sahagún en la precampaña, e incluso con el propio candidato La relación se recompuso una temporada al llegar Fox al poder, pero volvió a tronar cuando González hizo algunas críticas a la “pareja presidencial” Queda para la historia, sin embargo, el valioso papel que jugó González como estratega de Fox, particularmente en el diseño del Plan Milenium que arrolló a la vieja maquinaria priista en el 2000 y allanó el camino a la Presidencia de la República de un modesto empresario guanajuatense cuya máxima hazaña hasta entonces era haber dirigido Coca Cola México El propio González contó pasajes importantes de esa historia, en diversas entrevistas con el semanario Proceso: La iniciativa de que Fox llegara a Los Pinos surgió en marzo de 1993 “Después de que le quitaron el triunfo en su primera campaña en Guanajuato, Vicente entró en una depresión terrible, probablemente la única que le he visto desde que somos amigos; se dejó la barba y se declaró en huelga política mientras Salinas fuera presidente de México Preocupado por su salud emocional, lo invité a mi rancho en Veracruz, junto con un grupo de amigos” El grupo de amigos –entre ellos Bernardo Ávalos, Leticia Calzada y Berta Maldonado– le sugirieron a Fox, “para motivarlo”, que volviera a contender por la gubernatura de Guanajuato y después intentara “la grande” Fue la primera vez que “acariciamos esa utopía”, relató González en julio de 2001 La iniciativa empezó a concretarse en julio de 1997, cuando Cuauhtémoc Cárdenas ganó la jefatura de Gobierno del Distrito Federal y con ella, la plataforma para su tercera campaña presidencial En septiembre de ese año, Fox le pidió a su amigo: José Luis, quiero que me hagas presidente de México “Me dijo que hablaba en serio Refirió que había estado leyendo algunos libros sobre campañas en Estados Unidos y que yo tenía el perfil necesario para orientarlo Sabía que podíamos hacer mancuerna, como en Coca Cola, donde su fuerte era la mercadotecnia, y el mío la publicidad” Fox y González se conocieron en 1967, en Tampico, Tamaulipas, cuando ambos hacían sus pininos en Coca Cola Su amistad se estrechó durante el tiempo que laboraron en la refresquera e incluso se volvieron compadres y mantuvieron los lazos hasta que se atravesó en el camino Marta Sahagún y acabó por romperlos Pero antes del choque, el llamado Grupo Guanajuato –que incluía, entre otros, a Marta Sahagún, Ramón Muñoz y Eduardo Sojo--, trabajó unido bajo la coordinación de González Entre las ideas sobresalientes de éste, destaca la creación de la red “Amigos de Fox”, como un mecanismo para allegarse fondos y colaboraciones por encima de los límites del Partido Acción Nacional Riguroso, González demandaba al equipo foxista el cumplimiento cabal de los postulados del Plan Milenium, por ejemplo en la contención de las promesas de campaña del candidato y en el escrutinio de los fondos que se recaudaban, precauciones que finalmente se estrellaron contra la ambición de ganar a cualquier costo En su libro Asalto a Palacio, Guillermo Cantú reconoce el papel central que desempeñó González en la ejecución de la precampaña, pero señala que se le fue “escurriendo” el mando, por ser muy exigente e intolerante González reviró: “En todas las actividades de mi vida, siempre he tratado de hacer la cosas bien y puedo decir que me ha rendido frutos actuar de esta manera Cada cuál tiene derecho a ser fiel a su personalidad, a su modo de ser” El propio Cantú y González sabían que el fondo de la salida de este último del equipo foxista fue su confrontación con Marta Sahagún González nunca quiso hablar on the record sobre esa pugna, ni siquiera cuando la señora Sahagún volvió a separar a los viejos amigos ni cuando él tuvo que dejar su alto puesto ejecutivo en Televisa, presumiblemente porque un directivo del consorcio complació con la medida a la esposa del presidente Norteño de nacimiento, González era un personaje pragmático Sabía ser leal, pero sabía también que la lealtad es un camino de doble vía Sabía callar pero, a veces, disfrutaba compartiendo sus secretos y sus reflexiones sobre los personajes del México actual