La base política de los estados son los derechos humanos
* Concluye el Coloquio sobre defensa de garantías y “guerra sucia” en AL
México, D F, 18 de noviembre (apro)- Víctor Manuel Martínez Bullé Goyri, primer visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), dijo que “los actuales procesos de integración internacional exigen y requieren la vigencia de los derechos humanos”
Durante la inauguración del coloquio “Defensa de derechos humanos y guerra sucia en América Latina; de la memoria a la justicia”, Martínez Bullé Goyri afirmó:
“Los derechos humanos son un paradigma de las sociedades contemporáneas Estas son inimaginables si no resaltan el respeto y desarrollo de esas garantías, porque se han convertido en un requerimiento de la estabilidad política y social de los Estados”
Añadió: “Los procesos de integración internacional que vivimos presuponen, exigen y requieren la vigencia de esas facultades Incluso, fuera de todas las desviaciones y manipuleo que estas garantías sufrieron desde el propio poder en el pasado –como ocurrió en México–, es claro que para cualquier país son una necesidad ineludible”
Señaló: “En México no se hablaba de ellos ni de sus violaciones hasta los noventa, cuando se crearon órganos específicos para protegerlos Antes se hacía referencia al abuso de autoridad y a problemas de seguridad nacional, entre otros
“Por eso, el tema de la “guerra sucia” se relee con una visión actual, desde la perspectiva de un gobierno que entiende y asume sus responsabilidades en esta materia, lo que le da posibilidades reales de resolución a sus problemas en ese ámbito”, indicó
A su juicio, “los derechos humanos son un elemento propio de la organización social en que vivimos: el Estado social de derecho, cuyo origen se haya en el rompimiento con la lógica de funcionamiento estatal para la supervivencia del poder”
Al respecto, aclaró que “ese concepto no significa la simple vigencia de las normas jurídicas, sino la prevalencia de valores –como soberanía popular, democracia, división de poderes, principios de igualdad y de legalidad, y derechos humanos– que están implícitos y operan en la sociedad
“Por supuesto, esto requiere una actitud de sometimiento a las normas por parte de la autoridad y de los ciudadanos, porque ellas representan tales axiomas”, afirmó
Explicó: “Antes de las dos guerras mundiales, estos derechos eran un problema interno de los países Después se internacionalizaron al darse cuenta que no podía haber otro enfrentamiento bélico de tales dimensiones, y luego del fracaso de la Sociedad de las Naciones, creada después del primer conflicto Por ello se fundó un nuevo organismo: Naciones Unidas”
Añadió que el objetivo de la ONU “fue generar el imaginario de una comunidad internacional Se necesitaban metas comunes, capaces de aglutinar a las poblaciones, y éstas fueron los derechos humanos y la paz Así, tales preceptos se convirtieron en norma ética para naciones y gobiernos”
Dijo: “Un poder que se ejerce de manera respetuosa y promotora de los derechos humanos --en torno de los cuales hay consenso y aceptación casi universal-- se practica de modo legítimo Por ello, hablar de represión extrajudicial o terrorismo de Estado implica la negación propia del derecho y de la vigencia de los derechos humanos”
Por su parte, Estela Morales Campos, directora del Centro Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos (CCDEL), dijo que “reconocer que la pluralidad da cabida a los grupos minoritarios, permite a éstos su pleno reconocimiento, para la convivencia en un mundo diverso”
“Las violaciones a los derechos humanos son ahora un tema más visible, aunque las experiencias al respecto se remontan a décadas pasadas cuando, por ejemplo, reclamos políticos y sociales, como los de 1968 y de la década de 1970, recibieron como respuesta violencia, represión, persecución y los hechos que se denominaron “guerra sucia”, agregó
“Estos provinieron de diferentes sistemas de gobierno, tanto de dictaduras militares como de otros con un aparente proceso democrático”, concluyó