* Anuncian plan de modernización para acabar con la corrupción México, D F, 24 de noviembre (apro)- Al anunciar la puesta en marcha de un nuevo programa de “modernización” del Registro Público de la Propiedad y de Comercio (RPP), su director, Héctor Ibarra Muñoz, manifestó su confianza en que, “ahora sí, habrá eficiencia en los trámites y servicios y se acabará con la corrupción” Ibarra Muñoz, quien tomó posesión del cargo en septiembre de este año, reconoció que los intentos por “modernizar” la institución resultaron fallidos, lo que ha ocasionado el deterioro de parte del acervo inmobiliario de la capital del país Añadió que el nuevo programa fue elaborado luego de un diagnóstico del RPP, que evidenció una serie de problemas, como el deterioro de una “parte significativa” de los libros --algunos semidestruidos, otros ilegibles--, dilación en los trámites y servicios, carencias y corrupción, En entrevista con Apro, Ibarra Muñoz explicó que, al mismo tiempo, se estableció un “blindaje” en el RPP, con el fin de “preservar el acceso e integridad del sistema informático” de una institución, en la que están inscritos más de dos millones de libros, y a la que diariamente acuden cerca de mil 700 personas “Aquí no sólo hacía falta un diagnóstico del Registro Público, sino voluntad de enfrentar los problemas, como el de la corrupción Ahora hay una política de cero impunidad”, dijo Muñoz Ibarra en su amplia oficina del sexto piso del RPP, en la que dos monitores muestran las actividades en ventanillas, pasillos, antesalas y hasta en los accesos al edificio, ubicado en la calle de Manuel Villalongín, en la colonia Cuauhtémoc, de esta capital Lo cierto es que en el inmueble hay un circuito cerrado de televisión --de 60 cámaras, 40 de ellas instaladas en la bóveda del acervo--, lo que, indicó, permite detectar ilícitos y consignar a empleados, policías y “gestores” ante la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal “Es el sistema de seguridad más completo que hay”, presume Ibarra, quien explica que en los monitores –que se manejan manual o automáticamente--, se pueden leer con claridad documentos, registros, folios y aun los números de teléfonos celulares “Con este sistema, se pueden detectar documentos apócrifos, y en media hora, quien cometa un ilícito es consignado a las autoridades No estamos dando ninguna concesión a la corrupción”, añadió Y al insistir que los diversos programas de modernización “resultaron parciales”, dijo: “El diagnóstico mostró algo sabido, pero que había que corregir, como la corrupción, problema que, sin embargo, no es exclusivo del Registro Público de la Propiedad” Los intentos para “modernizar” la institución fundada en 1870 se iniciaron prácticamente en 1978, durante la regencia del profesor Carlos Hank González, cuando Mario Colín Sánchez era director del organismo En 1998, en entrevista con Proceso, el entonces director del RPP, Raúl Castellano Martínez-Báez, denunció que “políticas erróneas e intereses personales de los funcionarios en turno, ocasionaron que parte importante de la historia inmobiliaria de la capital del país estaba destruida total o parcialmente” Añadió que “muchos de los registros estaban extraviados, mutilados e incompletos y, lo peor, con documentación alterada o apócrifa” Más tarde, en las regencias de Manuel Camacho Solís y Oscar Espinosa Villarreal también fracasaron los planes para “poner al día” al RPP En el primer caso, y ante la decisión de microfilmar toda la información del acervo para facilitar su manejo, el problema se agravó: los libros empezaron a ser desencuadernados, lo que ocasionó la pérdida de valiosos documentos --¿Tuvo usted que empezar de cero? –se le pregunta ahora a Muñoz Ibarra, de 39 años, originario de Acapulco, Guerrero, quien trabajó en la Dirección de Inspección del Trabajo y en la Contraloría General del Gobierno del DF --Más que partir de cero, mi preocupación ha sido buscar soluciones a problemas específicos, como abatir el rezago histórico Aquí había asuntos que tenían cuatro o cinco años; ahora ya no hay ninguno Explicó que, de entre sus primeras medidas al frente del RPP, se mejoró la “comunicación interna” y se crearon unidades especiales para deshogar los asuntos pendientes